Sant Llorenç des Cardassar vivió ayer una noche inolvidable. El club de la localidad hizo historia al superar, en la tanda de penaltis, al Épila aragonés en la fase previa de la Copa del Rey (0-0). Esto significa que los mallorquines tendrán el premio de medirse a un rival de Primera División en Es Moleter, todo un hito. A excepción del Real Madrid, Barcelona, Real Sociedad y Athletic, que disputarán la Supercopa de España, cualquier otro equipo de la máxima categoría será su adversario. El conjunto de Miquel Àngel Tomás, campeón de Mallorca y de Balears de Preferente, y que posibilitó el ascenso a Tercera, da un paso más al conseguir este ilusionante billete. El meta Ángel, al detener el penalti a Diego, más el error de Redondo, que estrelló la pelota en el larguero, dieron el pase a los del Llevant, que no fallaron en sus lanzamientos -Jordi Ramis, Adrián Hernández, Julià Llull y Javi López-.

Se lo mereció desde el principio el Cardassar, que envió un balón al larguero por mediación de Miguel Álvarez en el 3. Dispuso de más ocasiones que el rival, como las de Llull y Adrián, pero se quedó con las ganas de batir a Francisco. Además, Ángel realizó un paradón a tiro de Hamza. Los maños resistieron en inferioridad númerica desde el minuto 83 por la roja a Diego, primero, y Gil en el 113, después, pero claudicaron desde los once metros.