A todo o nada. El segundo match ball de la temporada para el Atlético Baleares aterriza esta tarde en un Son Malferit que promete, como viene siendo habitual en los últimos partidos, el lleno absoluto (18 horas / IB3 Tv). Tras el varapalo del pasado 2 de junio ante el Racing de Santander, todavía demasiado reciente, el Atlético Baleares afronta su primera reválida ante un Melilla confiado en sus posibilidades.

La vuelta de las semifinales de la fase de ascenso a Segunda División recrea los miedos de la última eliminatoria ante el conjunto cántabro. Un Son Malferit lleno no fue suficiente para plantar cara al ajustado resultado del partido de la ida en El Sardinero (0-0). Como si de una fotocopia se tratara, los pupilos de Manix Mandiola vuelven a hacer frente a un marcador demasiado justo y casi letal en caso de que el Melilla consiga perforar la portería defendida por Carl Klaus.

El Atlético Baleares confía en varios supuestos para superar la ronda. Los mallorquines afrontan el partido sin haber perdido un solo encuentro en Son Malferitsin haber perdido un solo encuentro en Son Malferit en los últimos nueve meses. Conscientes de que, a pesar de ello, un empate a goles les deja fuera de la pelea, la premisa del equipo es presionar y no echarse atrás pese a ponerse por delante en el luminoso.

Los de Luis Miguel Carrión tampoco estarán cómodos en el sintético del campo palmesano. Para preparar la contienda los unionistas han entrenado toda la semana en una superficie similar a la que se encontrarán esta tarde en Son Malferit.

Mandiola confiará una vez más en la verticalidad de Nuha Marong en la línea de ataque y tendrá que volver a hacer malabares en la zaga para cubrir la importante baja por lesión del salmantino Kike López. Los mandos de la maquinaria vuelven a estar a cargo de Rovirola y Francesc Fullana y Canario y Samuel se encargarán de las internadas por banda.

El Melilla, que aterriza en la segunda fase del play-off de ascenso a Segunda tras eliminar al Villarreal B, ya demostró en el partido de la ida en el Álvarez Claro no amedrentarse ante la supuesta superioridad del líder del Grupo III. "Somos dos equipos que juegan bien, pero también hemos visto puntos débiles del rival y situaciones que podemos explotar. Creo que con nuestra forma de entender el fútbol le podemos crear muchos problemas al Atlético Baleares y estoy seguro que vamos a hacer un buen partido", reflexionó esta semana sin miramientos el técnico del Melilla.