El mallorquinismo tiene motivos para felicitarse por esta jornada veintinueve, que ha sido redonda. O casi. Porque el equipo bermellón hizo los deberes el sábado tumbando a un rival directo como el Real Oviedo (1-0), haciéndose con el golaverage, pero es que el resto de resultados de la jornada han sido favorables. De hecho, antes del duelo de Son Moix la sexta plaza estaba a cinco puntos y ahora ha ascendido dos posiciones en la clasificación, colocándose séptimo a solo dos, en una tabla mucho más apretada.

Las derrotas de los equipos implicados en la pelea por el ascenso han sido una bendición para los de Vicente Moreno. Cayeron el Albacete, Deportivo, Cádiz, Almería y Alcorcón para dejarles como los grandes vencedores de la jornada. Todavía restan trece partidos por delante, puede pasar cualquier cosa, pero es evidente que el panorama invita a la ilusión en clave rojilla. Los manchegos, que cayeron ante el Nàstic en el descuento (1-0), ahora están a cinco puntos, pero realmente son dos porque ya tienen en su casillero el triunfo, sin jugar, frente al expulsado Reus, mientras que al Mallorca se le sumará el 6 d abril. Y los gallegos, que piensan en el ascenso directo, se quedan a cuatro tras caer ante el Las Palmas (0-1) en Riazor. Precisamente los canarios, que estrenaron técnico con Pepe Mel, son el próximo adversario de los baleares en el Insular.

La igualdad de esta Segunda División no tiene fin. Las sorpresas se suceden cada semana, pero si había algún partido en el que los ojos estuvieran fijados era el del Martínez Valero. Y el Elche le dio una mano al derrotar a un Cádiz en alza (1-0). Y como también hay que cuidar el cogote, el Almería ve frenada su progresión al caer ante un Sporting muy irregular (1-0) y el Alcorcón, en caída libre tras llegar a ser líder, dobló la rodilla frente al Rayo Majadahonda (2-0).

Es cierto que hubiera sido mejor que el Granada hubiera caído contra el Zaragoza, pero la realidad es que los andaluces están muy lejos, con once puntos más, por lo que su triunfo (1-0) tampoco afecta de forma importante al Mallorca. Los de Los Cármenes mantienen su pelea por el liderato con Osasuna, que quizá le haría un favor a los isleños si gana hoy al Málaga. En este caso, los de la Costa del Sol se quedarían solo con cinco puntos más, una distancia que no asusta. Eso sí, todo pasa por que el Mallorca eleve su nivel como visitante y mantenga el de local. O no. Esta categoría es impredecible.