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Gente en la sombra

Rodolfo Ribé, Rudy: "En los partidos lucho con mis armas como un jugador más"

"La gente tiene que saber tocar. No es hacer ruido por hacer ruido. Eso no sería productivo. Tienes que saber cómo juega el equipo y con eso actuar" - "Lo vivo tan intensamente que necesito tres días para reponer mi voz y mis articulaciones"

Rudy posa en el descanso de un partido del Bahía San Agustín en el pabellón de Son Moix con sus bombos y trompetas para animar al equipo balear.

Es inevitable no haberse fijado en él o, mejor dicho, haberle oído si se ha acudido a presenciar un partido de baloncesto en los últimos años en Mallorca. Es un fijo. Sin él ciertamente los partidos son otra cosa y están carentes de animación. Asegura que prepara los partidos como si fuera un jugador más; es más, se considera como uno de ellos. Y su intención no es otra que la de contribuir y ayudar aportando su granito de arena para que su equipo logre ganar el partido. Es Rodolfo Ribé, más conocido por Rudy, un barcelonés que lleva muchos años afincado en Mallorca, que anima con sus tambores y trompetas al Bahía San Agustín desde la grada.

-Un partido de baloncesto en Mallorca no es lo mismo sin su presencia.

-[Ríe]. Hombre, no lo sé. Yo lo que pretendo es, con mi aportación, poder ayudar a mi equipo; y si se consigue mucho mejor.

-¿Se siente solo en los partidos?

-A veces sí y a veces no. Vamos a ver, la gente aquí es tranquila. Va a ver un espectáculo. Si se gana, se animan ellos solos. Si se pierde, critican. Yo soy de la opinión que si las cosas se preparan y luchan se pueden conseguir.

-¿Usted se prepara los partidos?

-Por supuesto. Todo tiene que estar estudiado. Yo voy con mis armas a luchar a los partidos como un jugador más. Lo vivo tan intensamente que necesito tres días para reponer mi voz y mis articulaciones. Acabo rendido.

-¿Cómo es su preparación?

-Tienes que interactuar con el equipo. Por ejemplo, los jugadores han de saber que yo tocaré un ritmo de defensa durante 14 segundos y luego zafarrancho de combate para poner nervioso al rival y que se precipite. Funciona. Sicológicamente juegan con los jugadores. Hay muchas estrategias para animar a los tuyos y para intentar desquiciar al rival.

-Parece fácil.

-La gente tiene que saber tocar. No es hacer ruido por hacer ruido. Eso no sería productivo. Tienes que saber cómo jugamos y con eso actuar. Yo voy a la lucha con mis armas.

-¿Y si se encuentra que el equipo contrario también tiene animación?

-Pues hay que hacer más ruido que los otros. Más para que su sonido no sea tan potente.

-No me diga que no le han llamado pesado en más de una ocasión.

-[Vuelve a reírse] Aquí nunca, pero en los pabellones contrarios sí. En el País Vasco, por ejemplo, me llegaron a arrojar cosas. Otros clubes prefieren ponerme en el 'gallinero'. En Valencia me echaron de la grada y me pusieron detrás de una canasta. El equipo contrario no metió ni un tiro libre. Yo voy a lo mío que no es otra cosa que animar a mi equipo, el Bahía San Agustín, y poner nervioso al adversario.

-¿Cómo ve la competición?

-La LEB de ahora no tiene nada que ver con la de antes. Antaño pienso que los equipos eran mucho más potentes con jugadores que subían y bajaban de ACB.

-¿Se ve animando en la ACB?

-No me pienso morir sin ver a un equipo mallorquín en la máxima categoría. Para ello, la ciudadanía se tiene que implicar. Está claro que mi gran ilusión sería animar en la ACB.

-¿Cómo empezó en esto?

-Nací en Barcelona pero iba y venía de Mallorca por que mi hermano trabajaba en hostelería aquí. Hasta que un día me quedé ya a vivir aquí. Luego viví en Los Olivos, donde fuí presidente durante años. Allí conocí a Miquel Ramis, que me animó a crear una peña para animar al Aqua Mágica. Se hizo y fue un total éxito. Los niños que formaron parte de ella se acordarán siempre, eso germinó muy bien.

-La desaparición del Palma Aqua Mágica debió de ser muy dura.

-Lloré mucho por dentro. Llegamos a ser muchos, más de doscientos componentes, y no dejábamos de animar. Fue una pasada, algo espectacular. Desaparecer fue una pena. No obstante, contento porque aquello germinó. Considero que la gente debe luchar por lo que es suyo

-¿Mejor el pabellón de Son Moix o prefiere el Toni Servera?

-El Toni Servera tiene una acústica alta. Allí logramos que los contrarios tuvieran muchas imprecisiones.

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