La euforia se ha instalado entre los empresarios del mundo del espectáculo que trabajan en Mallorca. Tras dos años de obligado parón, a causa de la Covid-19, el sector está recuperando la sonrisa y la ilusión, y los promotores consultados por este diario afirman que 2022 será el año de la recuperación de las grandes giras tanto de artistas nacionales como internacionales. La mayoría ya tienen cerrados los contratos, o están en negociaciones avanzadas, pero prefieren esperar a la hora de dar nombres. Entre los confirmados, pesos pesados como Fito&Fitipaldis, Estopa, Muse, Maluma, el Reggaeton Beach Festival o Beret.
«Las grandes giras regresarán a Mallorca el próximo año. En el estadio de Son Moix habrá tres cosas muy gordas, que aun no podemos avanzar, entre mayo y julio de 2022. El deseo es reunir a 3.000 espectadores de pie, más una grada, en total el aforo será de entre 5.000 y 6.000 personas», promete Felipe Menéndez, de la promotora Contemporanea Music.
Menéndez, que este mismo viernes pondrá en movimiento en el Visit Mallorca Estadi al huracán Nathy Peluso, afronta «con optimismo» la nueva temporada de conciertos pero advierte: «El mercado soporta lo que soporta. De los 50 conciertos programados este año se cancelaron 25. El público quiere ir a los conciertos de pie, y ahí radica gran parte de nuestras ilusiones», recuerda.
«En 2022 habrá muchos espectáculos y hay que ir con mucha cabeza. Hay que calcular mucho porque habrá demasiada oferta», coincide Miki Jaume, de Trui, empresa responsable, entre otras citas, del festival Cultura es Vida. «Con Trui ya tenemos 4 o 5 nombres importantes ya cerrados y muchísimas ofertas encima de la mesa. Estamos volviendo a la situación de antes de la pandemia, incluso hay un poco más de oferta, y ante eso hay que trabajar con sentido común. Estamos ilusionados, bienvenida la reactivación del sector», aplaude Jaume, quien da dos nombres para 2022 en el recinto de Son Fusteret: Estopa y Beret.
«En el Auditorium de Palma tenemos confirmados grandes nombres, de lo más granado. Pronto los anunciaremos», comenta Marc Ferragut, el máximo responsable de las salas del Passeig Marítim. «2022 será el año del resurgimiento, si no hay nuevos desastres. Solo falta que nos caiga un meteorito», dice con cierta resignación, recordando que el suyo fue «el primer sector afectado y el último en recuperarse».
«Esperamos que la actividad económica se recupere y la gente recupere sus nóminas. Hay ganas de ocio y lo estamos notando. Cada vez hay menos miedo, hay más confianza, y animamos a que toda la población se vacune», añade.
Desde el Auditorium, centro que forma parte de la Absedi junto a Es Gremi, Novo Café Lisboa y Casa Planas, entre otros espacios culturales, recuerdan que aun queda camino por recorrer. «Las salas todavía no han recuperado la normalidad. No pueden tener ni público de pie ni servir comida y bebida. Mejor que cualquier ayuda o subvención, lo que queremos es que nos dejen trabajar», reclama Ferragut.