Hoy voy a escribir sobre un tema del que básicamente no tengo ni idea, el danés y voy a hacerlo porque este texto en realidad tiene dos partes. Una ahora, con casi total desconocimiento del danés y otra más adelante, cuando espero al menos entender el idioma ya que me acabo de apuntar a las clases. El Estado danés ofrece clases gratuitas a todos los extranjeros con residencia en Dinamarca durante un máximo de tres años. Os voy a contar cómo es vivir en un país donde no entiendes la lengua materna de su gente, pero aún así eres capaz de vivir en él.

El danés es una lengua escandinava, con unos seis millones de hablantes, básicamente de Dinamarca e Islandia donde es la segunda lengua. El alfabeto consta de las letras latinas más tres adicionales (æ, ø, å). La parte más difícil para mí, sin haber empezado las clases, es que a diferencia de las lenguas latinas donde básicamente cada letra corresponde a un sonido, en danés es diferente, hay muchas letras mudas o que tienen un sonido totalmente que difiere del que esperaría. Por ejemplo, uno de las áreas de Copenhague se escribe Amagerbro y la pronunciación sería algo así como Amabgo (o al menos a mí me lo parece).

Dinamarca es uno de los países no angloparlantes donde el nivel de inglés es de los mejores del mundo. Esto, de facto, implica que casi todo el mundo es al menos bilingüe y sobre todo que el acento que tienen es muy neutro. Por este motivo es muy fácil comunicarte en inglés y entenderlo. Además, a diferencia de otros países angloparlantes, el inglés no es su lengua materna así que se puede decir que tienen más empatía contigo a la hora de esforzarse a hablar y entenderte.

¿Se puede vivir en Dinamarca y especialmente en Copenhague sin saber danés? La respuesta es sí, pero no vas a integrarte al 100%. Puedes ir al supermercado, al ayuntamiento, al banco, a cualquier restaurante y todo el mundo te va a responder en inglés. Aunque la mayoría de rótulos, etiquetas, cartas y anuncios están en danés, es normal ya que es el único idioma oficial. En mi caso, no necesito danés para poder hacer mi trabajo ya que somos un equipo internacional y el idioma usado es el inglés. Pese a ello, en mi empresa el 70% de compañeros son daneses, lo que hace que en algunos momentos hablen entre ellos en danés y, obviamente, no entiendo nada. Reconozco que ellos ponen todo el esfuerzo en hablar en inglés cuando hay alguien que no es danés en la conversación.

¿Y por qué quiero aprender danés? Primero porque lo relaciono con el catalán o mallorquín, dialecto de este en Mallorca. Aunque en Mallorca el catalán y el castellano son oficiales, como les digo a mis amigas de Madrid, Cristina y Lucia (un día os hablare de su asociación SOMOS en Copenhague), mi lengua materna es el catalán. Cuando estoy en Mallorca hablo el 90% del tiempo o más en catalán, con mis amigos, familia, etc.

Y quieras o no, cuando alguien te habla en tu idioma sientes más cercanía con ese desconocido. Eso no quiere decir que me moleste hablar en castellano, ni que mi nivel de castellano sea distinto de cualquier persona del resto de España. Si no entiendes el idioma del sitio en el que vives pierdes algo, no entiendes conversaciones, carteles, anuncios, limitas el número de eventos a los que puedes ir y sobre todo no te integras del todo en la cultura de la tierra en la que vives. Fins aviat, o como dirían aquí, Vi ses snart.