El nacimiento de la primogénita de los Príncipes de Asturias ha puesto de actualidad el debate sobre la conveniencia de reformar la Constitución en lo referente a la preferencia del varón en la sucesión a la Corona de España.

Catedráticos de Derecho Constitucional de diversas Universidades españolas coincidieron en la necesidad de reformar la Carta Magna como única vía para garantizar la igualdad de hombre y mujer en la sucesión a la Corona.

Pero esta no es la única vía para realizar estos cambios, ya que también se pueden hacer a través de una Ley Orgánica, que no conlleva la necesidad de disolver las Cámaras. David Ortega, profesor de Derecho Constitucional de la Universidad Rey Juan Carlos, cree no obstante que una ley de este tipo no puede vaciar de contenido una norma superior como es la Carta Magna, cuyo artículo 57 contradice al artículo 14 sobre la no discriminación por razón de nacimiento, raza, sexo o religión.

Retroactividad de la norma

Dónde también hay diferencias entre los catedráticos es sobre si podría aplicarse la retroactividad en el caso de que esa reforma se acometa cuando los Príncipes de Asturias hubieran tenido, por este orden, una niña y un niño.

Sobre este punto, Ortega opina que de acuerdo con el artículo 9-3 se establece la irretroactividad de las disposiciones sancionadoras, pero que, como ya ocurrió en 1995 con el Código Belloch, puede aplicarse la retroactividad si se favorecen los derechos individuales.

En la misma línea, José Acosta, catedrático de Derecho Constitucional de la universidad de Córdoba, destacó que el concepto de retroactividad sería aplicable para niveles menores pero no para una reforma constitucional, que es el plano supremo del ordenamiento jurídico.

En opinión de Acosta, el cambio se haría para evitar una inconstitucionalidad que hay dentro de la propia Carta Magna y, por tanto, no se puede contemplar los efectos retroactivos.

Desde el Tribunal Constitucional, su presidenta, María Emilia Casas, dijo que la reforma para garantizar el acceso de la mujer a la Corona debe seguir "los trámites y las vías normales" sin necesidad de acelerarse por el hecho de que el primer hijo de los Príncipes de Asturias haya sido una niña. Su ex presidente, Manuel Jiménez de Parga, destacó que el referéndum al que se sometería una reforma de la Constitución podría convertirse en un plebiscito sobre Monarquía o República, pero variar el artículo sería inevitable para que desaparezca la preferencia de los varones en la sucesión al trono.

También en cuanto al referéndum, el ponente de la Constitución Española, Gregorio Peces Barba, señaló que la consulta servirá para reafirmar el apoyo de la mayoría de los españoles a la Monarquía, lejos de cuestionarla. Además, abogó por introducir los cambios necesarios para eliminar la prevalencia del varón en la sucesión al trono con "calma y tranquilidad".

Otro padre de la Constitución y actual diputado del PP, Gabriel Cisneros, consideró por su parte que la reforma sí tiene una "moderada prisa", aunque cree que convendría hacerla al final de esta Legislatura. Apuntó, asimismo, que lo lógico sería que esta reforma se hiciera de forma separada de las otras que ha planteado el Gobierno porque en este caso se requiere referéndum y en los otros cambios no.

El portavoz del Consejo General del Poder Judicial, Enrique López, apuntó que "hoy por hoy en España hay un consenso generalizado respecto a la necesidad de adecuar estos preceptos de sucesión al principio de igualdad establecido en el artículo 14". En este sentido, el jurista matizó que "los que tienen iniciativa legislativa, deben adecuarlo cuando lo crean oportuno".

Sin embargo, la presidenta de la Asociación de Mujeres Juristas Themis, Ángela Alemany, pidió que los cambios se efectúen a la mayor brevedad posible. Unas prisas que no gustan al director de la Academia de la Historia, Gonzalo Anes, "porque es algo que se puede plantear en el futuro, no ahora".

"Hay muchos precedentes en la historia de España" de mujeres primogénitas, explicó el historiador, pero de momento, dijo que no contempla una reforma constitucional "porque Don Felipe es Príncipe de Asturias y Don Juan Carlos es un rey con buena salud que va a vivir muchos años". "Además, no sabemos cuántos hijos van a tener los príncipes y si éstos serán varones", añadió.