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Domingo, bodas y bautizos
Tom Hanks, que es una estrella internacional, andaba paseando por Central Park cuando se topó con una pareja que realizaba sus fotos de boda. Tom les felicitó y posó en varias instantáneas con Elizabeth y Ryan, que así se llamaban los novios. Cuando se case Belén Esteban habrá muchas estrellas invitadas, pero será otro tipo de estrellas. Porque la princesa del pueblo se casa. Se le "escapó" en SU programa, porque se lo preguntaron con la mano sobre el polígrafo como otros juran o prometen sobre la Biblia o la Constitución y al poli nadie le engaña. Así que cuando se case, porque todavía no, con tiempo, hay cosas que arreglar primero, y este año ha sido el año del casamiento de Kiko Rivera y entre bomberos no nos pisamos la manguera, habrá estrellas de otro tipo. No es probable que Tom Hanks se cuele en las fotos, porque igual las hacen en Paracuellos, en San Blas, en Benidorm o, más probable, en Telecinco o en un set de revista. Ana Obregón sí es una estrella internacional, como Hanks, y pasea por Central Park. Pero tampoco estará en la boda de la Esteban. Ni en el bautizo de la hija de Lequio, que será en Roma y en plan realeza, como toca. Pero sin Ana ni Antonia. Ni Olvido.
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Lunes, cobras
La cobra „nombre común de las serpientes venenosas Elapidae„cuando está irritada, o se siente amenazada, despliega una "capucha" aplanando las vértebras. La cobra escupe, muerde y tiene cientos de vértebras, lo que compensa la falta de patas y de paso le permite un movimiento veloz y zigzagueante de la cabeza. El ser humano, homo sapiens, escupe y muerde, pero tiene menos vértebras cervicales (siete concretamente) por lo que carece de la capacidad de movimiento craneal de la cobra. El especimen que nos ocupa es un humano, varón y caucásico, de Almería para ser exactos. Por tanto, es científicamente imposible que Bisbal le hiciera la cobra a Chenoa. A no ser que fuese el hombre cobra, protagonista de la película homónima (conocida como Silbido de muerte o Sssssss), que no. O que estemos hablando en sentido figurado, claro.
1
Martes, Beverly Hills
Enredados en asuntos más triviales „la cobra, el Gobierno, Mariano y Pedro, la reaparición de Pantoja, etc„ le habíamos perdido la pista a Sonia Monroy. Vale que ha echado raíces en LA, su lugar natural. Pero desde que se arrimó a los Oscar vestida de banderita tú eres roja, banderita tú eres güalda „en sentido homenaje a Maruja„ nada sabíamos de ella. Y no deja de ser otra pica en Hollywood, como Sara, Anita, Elsa o Pe. Ahora sí que la perdemos (la fuga de cerebros de la que hablaba Yola) porque se ha casado allende los mares. En Beverly Hills y en secreto, porque allí las bodas de relumbrón son así. Y, quizá, porque no logró colocar la exclusiva. Y eso que esa vez mantuvo el rojo pero prescindió del amarillo. A ver si había más suerte.
2
Miércoles, Manila
Dicen de Manila que es una ciudad de contrastes.
Isabel y Mario están en Manila. Los que llevan la cuenta, contabilizan casi una docena de portadas y dos millones y medio de euros en año y medio de noviazgo. La forma, casi invariablemente, es la misma, el contenido varía apenas: Isabel y Mario de la mano, Isabel y Mario de vacaciones, Isabel y Mario en un acto formal, Isabel sola hablando de su boda con Mario... Mientras, alrededor de los planetas giran los satélites. Por ejemplo, Julio José va y se recasa. Lo hacen sin Isabel y Mario pero ya vale como excusa para volver a hablar de la boda de Isabel y Mario que es, que me disculpe Charisse, la mollar. A esta parejita ya la vimos casarse. Ests rd su segunda boda, con motivo de sus bodas de lino. Me van a perdonar la ignorancia, pero yo no sabía que existían las bodas de lino. Ni las de papel, algodón, cuero, seda, madera, hierro, cobre, bronce, cerámica, aluminio, acero, cordón, marfil, cristal... y cualquier material que exista en el planeta Tierra. Pero si llevamos once portadas, decíamos, ya pueden ir contando. El literato y la celebridad están en Manila. Dicen que es ciudad de contrastes.
3
Jueves, trece
Todo el mundo habla de los ministros. Del ministro guaperas, de los mismos ministros de siempre, de los ministros madridistas, de la ministra de Defensa, del ministro que casó (dos veces, una de ellas „la de las chisteras y la portada cuché„ de postureo) a Fran Rivera y Lourdes Montes... De los trece ministros, porque son trece (como trece eran los comensales de la última cena). A Edmundo, que no es ministro entre otras cosas porque él mismo ha dicho que no le gusta madrugar, le fotografiaron el pasado día 13 de octubre durante una tarde de compras por la capital. Iba con una morena. La morena no era María Teresa. A partir de ahí, todo el mundo habla de Bigote. Y de los ministros.
4
Viernes, el runner
Dice Kiko Rivera, el runner, que no hay que buscarle tres patas al gato. El gato, así como por regla general el resto de los cuadrúpedos, tiene cuatro patas y, por ende, cuatro pies. El dicho, en puridad, es buscarle tres pies al gato pero viene a ser lo mismo. Alude la citada frase hecha a buscar donde no hay y el runner alude a sus supuestas desvanencias con su prima. Habrán reparado en que hablamos del runner Francisco, o el corredor Francisco. Kiko ha decidido dar un giro a su vida: ha sido padre (dos veces), se ha casado (una) y se ha lanzado al asfalto. Pero calzado con unas zapatillas deportivas. Para los escépticos: existen pruebas de esta férrea disciplina, de este cambio de hábitos, de este abrazo a la vida sana y la forma física. Hay fotos. En una de ellas se ven unas zapatillas deportivas pegadas a unas pantorrillas. La posición del cuerpo es estática y no hay rastro de las facciones. Pero creemos. La incipiente carrera deportiva ha sido breve, cierto es: comenzó el pasado lunes, continuó el martes, pero se interrumpió de forma abrupta el miércoles. Causas ajenas a su voluntad. Un dolor de muelas. Pero tenemos fe. Por la familia y eso.
