Diario de Mallorca

Diario de Mallorca

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Opinión

Víctimas de los de siempre

La larga cola que ve en la galería que ilustra la renovación de los abonados es el Mallorca. Estas personas, y muchas más que no...

La larga cola que ve en la galería que ilustra la renovación de los abonados es el Mallorca. Estas personas, y muchas más que no aparecen pero que siempre están, son el corazón que mantiene viva a esta institución de más de cien años y que renovarían su carnet aunque les apuntara una pistola exigiéndole no hacerlo. Es verdad que las facturas las paga Robert Sarver, algo que ya les va bien porque no hay que ser hipócritas, pero estas son las personas que están por encima de los Molango, Recio y compañía. El club les ha cerrado la Tribuna de Sol sin tacto alguno, y la solución que les ha dado, más allá de una rebaja insignificante, es el regalo de tener que ir a soportar muchas horas una larga cola para tratar de evitar la esquina de una grada en la que prefieren no estar. Y cuando lo hacen, la respuesta es una improvisación digna del tercer mundo futbolístico. Y todo para poseer un carnet que, en muchos otros clubes, recibirían por correo en sus casas. Los que han montado este caos, y por supuesto que no son los fantásticos trabajadores de esta institución, que ayer lo aguantaron todo, son los mismos que han bajado al Mallorca a Segunda B. Sobra repetir sus nombres.

Compartir el artículo

stats