El ayuntamiento de Santa Margalida ha informado en su perfil institucional de Facebook que la recogida selectiva se ha incrementado de forma considerable durante el pasado mes de agosto. Concretamente, según los datos municipales, el pasado mes se recogieron 409.120 kilos de residuos reciclables, una cifra que casi multiplica por tres a la registrada durante el mismo mes del pasado año 2016, 167.180 kilos de residuos. Los datos sirven al Ayuntamiento 'margalidà' para asegurar que se está "en el buen camino", si bien "todavía quedan muchos retos" por alcanzar.
El Ayuntamiento ha decidido publicar estos datos para salir al paso de una serie de rumores que se han viralizado en los últimos días en el núcleo de Can Picafort y que, de ser ciertos, dejarían en mal lugar a la empresa encargada de la recogida de residuos en el municipio del Nord.
Al parecer, un residente del citado núcleo costero publicó hace unos días en las redes sociales unas fotografías en las que se aprecia como un camión de recogida de residuos supuestamente se encargaba de recoger contenedores de envases ligeros (de color amarillo) junto a los residuos en masa que no son reciclables.
"Es una confusión"
Las imágenes se compartieron rápidamente entre los habitantes de Can Picafort, muchos de los cuales criticaron duramente la gestión de residuos del municipio y pusieron en duda que el reciclaje se realice de forma correcta. El técnico de Medio Ambiente de Santa Margalida, Toni Nadal, explicó ayer que todo es una "confusión" que "se ha ido haciendo una bola" y que, a su entender, podría contribuir a desmotivar a los habitantes a la hora de separar los residuos de forma adecuada.
"Incluso hay una empresa que ha dicho que no piensa reciclar más", añadió el técnico. "No podemos permitir que se utilicen las redes sociales para difundir masivamente información errónea, con los efectos negativos que esto puede tener", señala el perfil de Facebook municipal.
El Ayuntamiento apunta que si un camión recoge contenedores de selectiva junto con otros de rechazo "puede ser por dos motivos". Por una parte, el caso de las citadas fotografías corresponde a un hotel que utiliza contenedores privados. Según el Consistorio, el establecimiento propietario "reutiliza contenedores de rechazo para depositar una fracción de selectiva, algo que es muy común en los hoteles porque antes tenían todos los contenedores de rechazo (de color verde) y ahora separan cinco fracciones".
Para evitar confusiones, la institución obligará a partir de la próxima temporada a que los envases de los establecimientos privados se recojan en bolsas de color amarillo y que los contenedores tengan un distintivo del color de la fracción correspondiente.
Mala praxis
Por otra parte, "también es posible que cuando el operario de recogida de selectiva está recogiendo contenedores en la calle y ve que en el interior de un contenedor azul (papel y cartón) hay residuos impropios ordene a los de la recogida nocturna que lo carguen al rechazo porque el contenido no se admitirá en la planta de reciclaje". Se trata de un caso de mala praxis. "Si la gente mezcla los residuos dentro de un contenedor de selectiva, este contenedor debe vaciarse con los residuos de rechazo", lamenta Nadal.
La institución municipal optó por publicar esta aclaración porque "se dedican muchos esfuerzos a incrementar la recogida selectiva de residuos y muchos más que todavía deben hacerse, pero si propagamos estas falsas informaciones creamos escepticismo entre la gente, algo que no puede permitirse por respeto a quienes se esfuerzan en separar los residuos y al medio ambiente".
Cabe recordar que hace unos meses el Ayuntamiento presentó el nuevo dispositivo de limpieza urbana prestada por la empresa Audeca y anunció que tras el presente verano se iniciará la recogida de residuos orgánicos puerta a puerta en la Vila.
