Rábanos, rabanitos, algunos repollos, calabazas, zanahorias, verduras y hortalizas típicamente otoñales podían verse ya ayer en los puestos de venta de los payeses que acuden al mercado del Dijous de Inca. Lo cierto es que el cambio de estación se apreció de forma evidente pues las hortalizas de verano, pimientos y berenjenas, entre otras, son de un tamaño más pequeño. Los tomates se van encareciendo a cada día y los más hermosos se pagaban ayer a 2,20 euros el kilo. "Ya no tienen tiempo de crecer y van acabando", apuntaba Abdó Escanellas, payés de Inca. Aunque verduras hay todo el año, los más viejos dicen que las que se recolectan en esta época son las idóneas para elaborar unas buenas sopas mallorquinas.
Los quesos manchegos, almendras de Mallorca y el lomo de orza
La fireta del Dijous se sigue reinventando. Ayer, en la zona artesanal del mercado semanal de Inca se reservó un rinconcito para exponer productos ibéricos de calidad. Así se pudieron adquirir los famosos quesos manchegos, el lomo o las costillas de orza, las salchichas y morcillas en aceite de oliva del puesto de Antonio Argüello, charcutero albaceteño; las almendras mallorquinas y la coca de higos y almendras de Maria Figuerola, payesa de Inca; y los aceites y balsamos de almendra elaborados por Ander y Susana, artesanos navarros.
A ver cuando finalizan las obras de ´la Seu´
Desde hace unas semanas se están abriendo zanjas en muchos puntos de Inca para que una empresa coloque unas conducciones. Se trata de un nuevo servicio a los ciudadanos que va a prestar una empresa privada. El problema es que Inca es una ciudad cuyos vecinos están muy escarmentados de tantas obras públicas y aperturas de zanjas. Lo cierto es que se antoja complicado comprender como se ha tenido la calle Vidal abriéndose y cerrándose intermitentemente tres semanas para colocar una tubería, incluso ayer, día de mercado.
