La historia de este contencioso se remonta al año 1999, cuando estos terrenos fueron declarados urbanizables. Dos años más tarde, el 31 de enero de 2001, el Ayuntamiento aprobó por unanimidad la desclasifiación de esta zona de Es Caülls, lo que motivó los dos contenciosos de la propiedad. Sin embargo, en la aprobación inicial de abril de 2001 el PP ya se desmarcó de su voto favorable y se abstuvo.
Ya en la legislatura de 2003-2007, el entonces alcalde José Ramón Bauzá cumplió lo que anunció en la campaña electoral y en noviembre de 2003, con los votos favorables del PP y de IDMA y en contra de toda la oposición, se volvieron a declarar urbanizables estos terrenos por temor a posibles indemnizaciones. No obstante, debido a las deficiencias en el expediente de recalificación presentado por el Consistorio, el Consell no pudo volver a recalificar los terrenos, que permanecen como no urbanizables.
