Algo más de 300 personas se reunieron ayer en el cementerio municipal de Son Coletes de Manacor, en recuerdo a los asesinados en el municipio en defensa del gobierno de la Segunda República, y como homenaje a su proclamación hace 80 años.

Organizado por el Comité de Son Coletes, el acto sirvió para exigir "de una vez por todas" y tras años de conflicto, la instalación definitiva del mural pro republicano creado por el manacorí Andreu Pascual Frau y diseñado por Jaume Ramis en memoria de los que lucharon frente al levantamiento nacional.

"Parece increíble que el ayuntamiento de Manacor se niegue a hacerlo, después de que ya haya réplicas de él en el Jardí de la Memòria de Calvià, en Petra, Porreres, Palma o Capdepera", recordó el actor Salvador Miralles, quien se aventuró a evocar cómo habría sido la historia de Mallorca de no haber triunfado el levantamiento de julio de 1936. "Tendríamos una industria fuerte y propia paralela al turismo, una sociedad de personas responsables, con partidos de izquierdas y de centro derecha comprometidos con el país. Seríamos reconocidos en Europa por nuestros pintores, escritores o investigadores y el catalán no estaría discutido".

Tras un par de canciones interpretadas por Maria Antònia Gomila, la presidenta del Col·lectiu Dones de Llevant y el historiador y colaborador de este periódico, Antoni Tugores, rememoraron la importancia de la mujeres en la lucha por salir del olvido y recordaron las figuras de Dora Amer, hija del batle Garanya y de Joana Caldentey.