Las calles Jaume Busques y Ave Maria de Son Sardina se vieron sorprendidas por una avalancha de estiércol con las lluvias acaecidas en la jornada de hoy viernes.

A raíz de las fuertes precipitaciones, un albañil abrió las puertas de una finca donde se encuentra un establo con el fin de evacuar el agua que se encontraba dentro, inundando dichas calles de la localidad con excrementos de caballo.