El Consorcio de la Platja de Palma no recibirá ni un euro de dinero público para la reconversión de esta zona turística. Incluso ha paralizado proyectos ya redactados como la rehabilitación de 13 edificios en la que se preveía una inversión de unos 19 millones de euros o las obras de mejora de infraestructuras en Can Pastilla y Las Maravillas con un gasto estimado de unos 8 millones de euros. No obstante este organismo público mantiene cuatro directivos que suponen un gasto anual en salarios de más de 194.000 euros. Esta cifra representa una reducción en su conjunto de más del 15 por ciento respecto a lo que cobraban en la pasada legislatura durante la etapa de Margarita Nájera, que ascendía a una cantidad superior a los 230.500 euros.

El alto cargo con el salario más alto es el gerente del Consorcio, Álvaro Gijón, que cobra 65.000 euros, un 11 por ciento menos que Nájera, quien recibía 73.439 euros al año. Le siguen en cantidad el director de Planificación Urbana, Bartolomé Abad, y la directora de Relaciones Institucionales, Lourdes Reynés, que se llevan idéntico sueldo, es decir, 50.464 euros frente a los 63.239 que se desembolsaban a esos mismos cargos en la etapa anterior lo que implica una reducción del 20 por ciento. La secretaria de dirección, Eva M. Frontera, que es un cargo de libre designación en relación a los otros tres que son de alta dirección, cobra 28.500 euros lo que supone una reducción superior al 6 por ciento respecto al equipo anterior.

Estas incorporaciones de cargos directivos se produjeron entre el 11 de junio y el 29 de septiembre tras las pasadas elecciones autonómicas y municipales.

El conseller de Turismo y presidente de este organismo público, Carlos Delgado, ha reconocido que ya sólo confía en la iniciativa privada para ejecutar la rehabilitación. La redacción definitiva del documento urbanístico, conocido como el Plan de Reforma Integral (PRI), se retrasa un año y medio sobre la fecha inicial prevista por el actual gerente, Álvaro Gijón, que era el próximo diciembre.

Delgado ha asegurado que la plantilla se ha reducido bastante y no tiene la intención de eliminar esta entidad pese a no recibir dinero del Gobierno central.