La todavía presidenta del Parlament, Xelo Huertas, ha anunciado que llevará a la justicia las acusaciones vertidas por su partido, Podemos, de haber utilizado su cargo público para que el científico y alto cargo podemita Daniel Bachiller recibiera un trato de favor con dinero público. Huertas, que ha manifestado "ser inocente", ha asegurado que presentará "demandas y querellas" por la apertura de su expediente contra "bastante gente" pero ha evitado concretar contra quién.

Así se ha expresado a su llegada al Parlament, donde hoy preside un preside un pleno ordinario. La presidenta de la cámara, que fue ayer suspendida de militancia por Podemos, ha dejado en el aire si dimitirá de su cargo: "Lo tengo que consultar con mi abogado". Quien sí ha dejado claro que pase lo que pase mantendrá su escaño ha sido la otra parlamentaria expedientada, la diputada menorquina Montse Seijas, que ha denunciado "haberse enterado por la prensa" de su situación y que todavía no se le ha notificado.

Aunque ambas han negado las acusaciones, Seijas ha defendido la financiación del laboratorio de Bachiller: "Que no se renueve un laboratorio del prestigio del de Bachiller, cuando se defiende la atracción de talento, es una incongruencia, que parece responder a una caza de brujas", ha criticado la diputada.