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Vandalismo

Exterminio de abejas con insecticida

El apicultor Carles Gibert encontró ayer las colmenas de su apiario, ubicado entre Alaró y Santa Maria, con miles de ejemplares muertos por la mano del hombre

Carles Gibert es un apasionado de la apicultura. Cuenta con más de 20 colmenares repartidos en diferentes puntos de la Serra de Tramuntana para elaborar la marca característica y de notable aceptación Mel de Tramuntana. Ayer por la mañana recibió un duro golpe. Cuando llegó a uno de sus apiarios observo que miles de sus abejas estaban muertas. Rápidamente comprobó que había sido un exterminio y nada tenía que ver con una muerte natural. Lo más probable es que utilizaran algún insecticida que dejó sin vida a los enjambres.

"La gente desconoce la importancia de las abejas para mantener el ecosistema natural. Son las encargadas de polinizar las plantas para que se sigan reproduciendo y aquí parece que alguien le molestan y las ha matado", explicaba desolado Carles Gibert.

El apicultor cuenta con cerca de 20 colmenas en esta zona de Alaró y pudo comprobar cómo las abejas de siete de ellas habían muerto todas. Del resto solo quedaban un 20%. El apicultor piensa interponer denuncia ante la Guardia Civil con el objetivo de encontrar a los culpables de la aniquilación. La apicultura es una actividad agraria reconocida y regulada por la Conselleria de Agricultura. Gibert cuenta con todos los permisos para llevar a cabo su pasión. "Con las abejas no ganas dinero, al contrario, en muchas ocasiones perdemos, pero para mí las abejas son una pasión y disfruto con su cuidado y poder extraer la miel", indicó Carles Gibert.

El apicultor apunta como una de las posibilidades el hecho de alguien que viva por la zona, le puedan molestar las abejas y haya decidido acabar con ellas. "Es verdad que en ocasiones van a beber en las piscinas y ello puede incomodar a sus dueños", razona. No obstante, el apicultor indica que la mayoría de casas de la zona están a más de 500 metros de su colmenar y es extraño que las abejas puedan llegar tan lejos en sus periplos de polinización.

La abeja de miel es uno de los insectos más importantes para el medio ambiente y el ser humano. Ello se debe no solo a su producción de miel, cera o jalea real, sino también por su papel fundamental en la polinización de la mayoría de los principales cultivos de frutas, hortalizas y vegetales, así como plantas no cultivadas que impiden la erosión del suelo.

Carles Gibert indicó que "menos mal que algunas de las abejas reina no se han visto afectadas por el veneno y tal vez consigamos reproducir los enjambres, pero el daño que se ha hecho es muy importante".

Gibert comentó que lo más probable es que se utilizara algún tipo de insecticida rociando las colmenas por completo. "Las abejas son muy sensibles y cualquier tipo de veneno les puede afectar. El insecticida de mosquitos puede ser mortal para las abejas, al igual que el polvo utilizado para acabar con las hormigas, aseveró Carles Gibert.

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