­La confianza del empresariado balear está mejorando a lo largo del último año, y lo está haciendo con mayor dinamismo en sectores que hasta hace poco mostraban una fuerte debilidad, como el comercio y la construcción, según destacó ayer el conseller de Economía, Joaquín García. Sin embargo, todavía son más los que opinan que su negocio va a registran una evolución negativa durante el primer trimestre de este año.

Si el estado de ánimo de los empresarios de las islas se compara con lo que sucedía hace un año, la mejoría es evidente, con un incremento de los niveles de optimismo del 14,5%, ligeramente por encima de la media española, del 13,9%. Si la comparación se hace con carácter trimestral, el resultado es negativo, pero eso es habitual a causa de la fuerte estacionalidad de la economía del archipiélago, que registra los mayores niveles de actividad durante el verano y los más bajos en invierno.

Evolución por sectores

Por sectores, se destaca que el mayor crecimiento interanual de la confianza de los empresarios de las islas se da en dos de los que se han visto más duramente golpeados por la crisis, como son el comercio, con una subida del 23,4%, y la construcción, con un 21,5%, mientras que en la hostelería y el transporte esa mejoría es de solo un 7,2%, y en la industria alcanza el 6%.

Desde el Govern se apunta que los dos primeros han comenzado a mostrar a lo largo de 2013 los primeros síntomas de reactivación. Así, en el caso del comercio se viene registrando una mejoría del consumo, especialmente en la rama de la alimentación, mientras que en la construcción ha crecido el número de viviendas proyectadas o la inversión.

Desde la Cámara de Comercio también se señala esta buena evolución, aunque se admite que la recuperación está siendo "lenta", y se advierte de que "esta leve mejoría tendrá escasas repercusiones en la economía real a corto plazo".

En este sentido, hay que tener en cuenta que siguen siendo más las empresas que creen que el primer trimestre de este año se cerrará con un resultado desfavorable, que las que prevén un incremento en sus ingresos.

En concreto, el 43,3% de los comerciantes pronostica la citada evolución desfavorable, frente a un 13,3% que apunta un resultado positivo al inicio de este año. El 43,3% restante espera una situación de estabilidad.

En la construcción, el 46,1% augura un primer trimestre del año con resultado negativo, frente al 14,4% que cree que su situación mejorará.

En la industria, el 55,3% espera una evolución desfavorable y solo un 10,7% se muestra confiado en una mejoría.

Sin embargo, estos porcentajes son mejores que los que se apuntaron para el primer trimestre del pasado año.

EL DATO

La debilidad de la demanda es el principal obstáculo

A la hora de justificar el pesimismo que mantienen muchos empresarios isleños, un motivo destaca por encima del resto: la debilidad de la demanda. Los ciudadanos de Balears siguen mostrando muchas reticencias a la hora de gastar. Y esta situación es esgrimida por un 67,5% de los encuestados.

En segundo lugar aparecen las dificultades financieras, con un 43,6% de las respuestas. No hay que olvidar que son muchos los que se siguen quejando de los problemas para acceder a un crédito. La tercera causa expuesta, con un 37,1% de las respuestas, es el aumento de la competencia.