Dos cifras explican el triunfal agosto turístico mallorquín en 2011: nadie llenó tanto sus hoteles como Balears y nadie tiene una concentración de hoteles como la mallorquina. Ambos datos figuran en el informe del sector turístico de Banca March, que le pone cifras al exceso de plazas que los propios hoteleros ven como problema: en Balears hay 306 plazas de hotel por cada mil habitantes, el triple que en Canarias (109) y ocho veces más que la media española (ocho plazas por cada mil habitantes). Y eso convierte a las islas en la mayor concentración hotelera del mundo, toda vez que ningún país del mundo alcanza tal proporción de hoteles: frente a las 306 de Balears, el resto de la España costera tiene 54, cifra que solo supera Grecia (con 69 plazas por cada mil habitantes), y muy superior a la de Italia (37), Francia (19), Brasil (11), Egipto (5) o Turquía (8). Eso deja dos conclusiones: Balears depende más que ninguno del turismo y los competidores tienen aún mucho margen para aumentar oferta hotelera.