En el programa 'First Dates' de Cuatro las citas son muy variadas. Factores como la falta de química, diferencias en ideologías políticas, incompatibilidad en preferencias sexuales o la distancia geográfica suelen ser los motivos más comunes.

Esta semana la cita del día fue la que juntó a Montse, una asesora fiscal de 61 años y Elisabeth, una mujer de origen catalán que vive en Sevilla. La diferencia de edad podía ser la causa de un primer y flojo contacto entre las dos solteras que también, aunque finalmente no fuer por esta diferencia sino por motivos distintos.

Montse defendió con orgullo su identidad catalana al afirmar: "Es evidente que soy catalana y no voy a ocultarlo". Sin embargo, esta declaración desconcertó a su cita, quien respondió de manera contundente: "No me gusta el acento catalán, con todos mis respetos. Nunca he hablado catalán porque no me agrada ni el idioma ni el acento".

Ante esto, Montse respondió subrayando que, a diferencia de ella, no se identifica como española: "Tengo una identidad muy diferente a la española, con costumbres y formas de ser distintas. Por ejemplo, los toros me producen rechazo", señaló.

Montse y Elisabeth durante la decisión final de 'First Dates' Cuatro

La decisión final

Las dos solteras coincidieron en que tenían posicionamientos e ideas contrarias y las dos optaron por no tener una segunda cita, algo que era evidente nada más sentarse.