Con mucha higiene, controles de temperatura, mascarillas y respetando la distancia social ha sido la vuelta al trabajo de este año, tras un verano atípico por la pandemia provocada por el COVID-19. La mayoría de las empresas han establecido unos estrictos protocolos de seguridad para el regreso de sus trabajadores a las oficinas. La principal medida es la mascarilla obligatoria, salvo cuando estás sentado en tu puesto de trabajo. Mantener la distancia de seguridad en todos los espacios es una prioridad, por eso en una empresa que cuenta con 600 empleados han dejado a la mitad de la plantilla teletrabajando y el comedor lo han divido en varios turnos para evitar aglomeraciones.