Rechazo y confusión en las calles de Mallorca tras la iniciativa de la vicepresidenta Yolanda Díaz, de promover que las cadenas de alimentación ofrezcan cestas de la compra de productos básicos a precios congelados con la finalidad de procurar que el impacto de la inflación sobre los bolsillos de los ciudadanos sea el menor posible.

«La cesta es bastante pobre, no incluye los productos básicos de primera necesidad», lamenta Rubén Sánchez, ciudadano de Palma.