Desde que se levantó la cuarentena en Bolivia el 1 de junio se ha multiplicado por seis el número de fallecidos y contagiados por coronavirus. Los hospitales están desbordados y los cementerios también. Solo en cinco días de la semana pasada la policía retiró más de 400 cadáveres de domicilios y vehículos en las ciudades más grandes. La Paz y Cochabamba , en el centro del país, se están llevando la peor parte. En el cementerio de El Alto, se están celebrando unos 40 entierros diarios, antes de la pandemia solían rondar los cinco. El país ya acumula cerca de 3000 víctimas mortales por coronavirus.