Tras ocho días de actividad frenética, el Papa Francisco ha culminado su viaje por Sudamérica con una despedida, en el aeropuerto de Asunción. El pontífice se marcha tras un fin de semana en Paraguay en el que le ha dado tiempo a visitar una de las barriadas más pobres de la capital y a oficiar una ceremonia rodeado de miles de jóvenes.