En un rincón de una iglesia de Taclobán, y como sonido de fondo el alboroto del resto de supervivientes del tifón Haiyán que refugian en ese lugar. Esta madre se preparaba con una sonrisa para dar a luz a su bebé. Acompañada por algunos familiares y personal sanitario voluntario, la madre consigue en sólo unos minutos dar a luz a esta niña. Es probable que la llamemos Yolanda, dice su padre mientras una enfermera limpia y prepara al bebé. En pocos segundos madre e hija descansan sobre las baldosas de esta iglesia reconvertida en centro de refugiados de Taclobán.