La selección española de waterpolo, proclamada campeona del mundo de waterpolo este domingo, ya está de vuelta en casa. Decenas de aficionados y familiares les esperaban en el aeropuerto de El Prat, en Barcelona, donde se desataba la locura. Los jugadores y técnicos, tras recibir abrazos y besos, han posado para la prensa con sus medallas de oro.España ha logrado el ansiado título del mundo después de años de quedarse en las puertas y muchas finales perdidas.