Hamza, jugador del Palma Futsal, vive, desde este martes, uno de los meses más especiales del año. El Ramadán llega a la rutina musulmana y el jugador ceutí tendrá que compaginar el esfuerzo del ayuno con los entrenamientos del Palma Futsal. Por ello, el ala del cuadro balear analiza cómo establecer un equilibrio físico y mental en un mes que requiere tal dedicación y entrega a la religión. Hamza afronta los siguientes treinta días con ilusión y con la fuerza necesaria para que su rendimiento sobre el parqué siga siendo igual o mejor.