En una de las secuelas más espantosas de la guerra de Ucrania, un vecino de Madrid ha sido detenido en una operación policial por esconder en su domicilio un volumen de Ana Karenina, libro de presunto autor ruso. Se le acusa de un delito de colaboracionismo con el genocida Putin. Según Josep Borrell, es inadmisible que McDonald's haga el sacrificio de cerrar sus establecimientos en Moscú, mientras desde España se dinamita el esfuerzo de guerra.