La multinacional tecnológica Samsung Electronics lanzó hoy a la venta por primera vez sus nuevos "smartphone" de gama alta Galaxy S7 y S7 Edge, que estarán disponibles de momento para los consumidores de unos cincuenta países.

Los modelos Galaxy S7 y su versión Edge de bordes curvos llegaron a las estanterías de Corea del Sur, donde Samsung tiene su sede, y a lo largo del día se pondrán a la venta en España, el resto de la Unión Europea, Estados Unidos, China y otros mercados, indicó a Efe un portavoz de la compañía en Seúl.

En el caso de América Latina, de momento Samsung no ha querido revelar la fecha en la que se pondrá a la venta el Galaxy S7, aunque se estima que será en los próximos días o semanas.

Los establecimientos de telefonía móvil del centro de Seúl están más concurridos de lo habitual, aunque sin grandes colas, y en su interior el Samsung Galaxy S7 ha acaparado un fuerte protagonismo con numerosos modelos de prueba, carteles, folletos y pabellones promocionales.

El dispositivo en Corea del Sur se ha puesto a la venta por 836.000 wones (626 euros, 700 dólares), un precio de salida ligeramente menor que el de su antecesor, el S6.

Samsung, que confía en que el Galaxy S7 supere en ventas al S6, ha asegurado que las reservas por parte de clientes del S7 han sido mayores que las registradas hace un año del modelo anterior, aunque no ha aportado cifras concretas.

El Galaxy S7 posee una pantalla de 5,1 pulgadas y estructura convencional, mientras el S7 Edge es de 5,5 pulgadas y bordes curvos.

Ambos teléfonos presentan como principales novedades la resistencia al agua, una mayor potencia y una cámara más rápida.