Puede que hace tiempo hayas superado la adolescencia pero, sin embargo, has notado que tu piel se ha vuelto más reactiva, con más puntos negros y comedones y que a veces, incluso, te salen granitos alrededor de la zona de la boca y la barbilla. Es uno de los problemas dermatológicos más comunes que ha traído la nueva normalidad y el uso continuado de las mascarillas. Es el llamado 'maskné', palabra resultante del acrónimo de la palabra mascarilla en inglés, 'mask', y acné.
No se trata de acné juvenil, sino de acné mecánico, producido por el uso de este accesorio sanitario necesario para protegernos frente al coronavirus. La reducción de oxigenación de la piel, la humedad que genera nuestro propio aliento y el sudor, así como el roce de la tela o el polietileno o papel contra la piel provocan microdesgarros en la dermis que facilitan la entrada de bacterias y suciedad que pueden acabar convirtiéndose en granitos, rojeces o irritaciones.
Se da más en mujeres
Este problema dermatológico afecta a toda la población, si bien hay un grupo especialmente propenso: mujeres con pieles grasas, mixtas o sensibles, o aquellas que tienen o han padecido rosácea. En pieles más gruesas, además, el acné se formaría en la última capa creando micropápulas o pequeños quistes.
"Cuando llevamos el rostro cubierto con mascarilla, la humedad y el vapor, así como cualquier secreción de saliva o mucosidad, se acumula en la zona de la boca y la nariz, bloqueando el conducto de salida de la secreción sebácea. La presión y la falta de oxigenación provocan que se taponen los poros, lo que promueve la aparición de comedones y granitos", explican desde el departamento de formación de Natura Bissé.
Factores que lo empeoran
Los expertos en cosmética de esta firma especializada en el cuidado de la piel nacida en Barcelona en 1979 han localizado cuatro factores que agravan el 'maskné':
Piel grasa
Si la piel es de tendencia grasa, el exceso de sebo que normalmente produce obstruye los poros todavía más. Este hecho, sumado a la humedad que se genera bajo la mascarilla, facilita la aparición de ciertas bacterias patógenas, como el 'Cutibacterium acnes'. El equilibrio de la microbiota cutánea se altera y aparece el acné. 'TIPS': Se recomiendan productos con ácido salicílico, un efectivo agente antibacteriano.
Estrés
Es sabido que el estrés puede causar inflamación en la piel, lo que empeora los síntomas de acné, rosácea o dermatitis. El cortisol es la hormona que se genera bajo situaciones de estrés y es capaz de incrementar los brotes de acné. Los expertos aconsejan que si nos notamos estresados, busquemos métodos de relajación que nos ayuden a sobrellevar situaciones de incertidumbre y de cambios con la máxima serenidad. 'TIPS': Quizá sea el momento de probar el 'minddulness' o meditación para ver las cosas desde otro ángulo y sentirnos más calmados y con más energía.
Pieles sensibles
Las pieles sensibles también tienden a la inflamación, lo que las hace especialmente susceptibles a sufrir 'maskné'. Si la piel es muy delicada se necesita fortalecerla y elevar su umbral de tolerancia ante las incomodidades cutáneas. 'TIPS': Evitar mascarillas sintéticas o derivadas de plástico, que generan más oclusión o irritación, y optar por las de algodón. Ojo con las quirúrgicas (blancas o azules). A pesar de su apariencia de papel, son derivadas del plástico y pueden generar roces.
Maquillaje
La presión de la mascarilla sobre la piel hace que los pigmentos del maquillaje penetren más y puedan obstruir los poros con más facilidad. 'TIPS': Si no queremos prescindir de él, la clave es elegir texturas ligeras, con una cobertura más natural. E intentar evitarlo al máximo en la zona afectada.
Preparar el rostro
"Es imprescindible que la función barrera de la piel se mantenga en buen estado para evitar los problemas que pueden dar como resultado del ambiente que se genera entre la mascarilla y la piel, por eso es recomendable aplicar ingrendientes con funciones equilibrantes, reparadoras y regeneradoras", explica Elisa Muñoz, responsable de desarrollo de Camaleon Cosmetics, la firma de Zaragoza pionera en poner a la venta toda una línea específica para tratar este problema dermatológico, Maskné Repair.
Se trata de tres productos de uso diario (un biofilm con agentes hidratantes que crea una barrera protectora, un 'mist' de agua termal para reforzar las defensas y una crema reparadora) y dos mascarillas monodosis (de limpieza y extrahidratación) para un cuidado extra de limpieza e hidratación. El pack sale por 36 euros, y está a la venta en la web de la compañía y en farmacias.
Desde Natura Bissé destacan dos de sus productos estrella para atajar el 'maskné': su mascarilla purificante y limpiadora (41,50 €) y un potente concentrado para oxigenar la piel (178 €).
Las 5 reglas de oro
Para prevenir la aparición del 'maskné' y minimizar sus síntomas, solo hay que seguir estas pautas:
Limpieza facial dos veces al día
Como sucede en cualquier afección de la piel, la limpieza es fundamental. Hay que lavar el rostro con limpiadores específicos dos veces al día, antes y después de usar mascarilla. 'TIPS': Hay que elegir un limpiador suave, un producto adecuado respetuoso con los lípidos de la piel, y que no contenga jabón.
Hidratación constante
Es aconsejable utilizar productos que hidraten y refuercen la barrera cutánea, pero en texturas ligeras. Mejor dejar para más adelante aceites y cremas untuosas que resultan demasiado “pesadas” para la piel. 'TIPS': Se recomienda aplicarse la hidratante 30 minutos antes de ponerse la mascarilla. Para después de retirar la mascarilla se aconseja usar un producto más nutritivo, regenerador y reparador de la barrera hidrolipídica.
Equilibrar
Usar productos adecuados que equilibren la microbiota de la piel y mantengan la hidratación. Los microorganismos en nuestra piel actúan como moduladores de la respuesta inmune, reducen la inflamación, refuerzan la barrera cutánea y dificultan la ocupación del territorio cutáneo por otras bacterias patógenas. 'TIPS': Existen en el mercado una gran variedad de hidratantes prebióticos y probióticos que calman y protegen la dermis.
Purificar intensamente
Los productos que favorecen la oxigenación serán los mejores aliados. Ayudan a que la piel respire mejor y le aportan esa dosis de pureza y frescor que está pidiendo tras horas tapada por una mascarilla. También se aconsejan las mascarillas detox que aportan un extra de oxígeno. 'TIPS': También es importante airear la zona cada ciertas horas de uso de mascarilla. Durante la jornada laboral debemos disponer de momentos en que podamos quitarnos la mascarilla de forma segura.
