El 25 por ciento de la población española se ve afectada por la halitosis o mal aliento. Es un problema de difícil detección para uno mismo y ha de ser tratado por un especialista para descartar posibles afecciones ocultas, según los datos del estudio 'El mal olor bucal: aspectos teóricos y prácticos', de A. Bosy.

La halitosis está considerada como un problema de carácter social relacionado con una higiene bucal deficiente o con enfermedades de la cavidad oral. Las causas de esta patología son variadas y dependen de su origen.

En un 90 por ciento de los casos, según los últimos estudios científicos, el origen de la halitosis está en la propia cavidad oral, "mientras que en el resto de los casos, se debe a factores extraorales, como enfermedades digestivas, respiratorias, sistémicas o problemas nasales", ha comentado la odontóloga responsable de la dirección Médico-Asistencial de Sanitas Dental, Patricia Zubeldia.

Cuando el origen del problema se encuentra en la cavidad oral está relacionado con la acumulación de placa bacteriana en la lengua. La halitosis puede ser provocada también por causas patológicas como las enfermedades periodontales, las caries, las úlceras y los problemas de faringe o aquellas necrosis relacionadas con radioterapia y quimioterapia y con una deficiente higiene oral.

En cuanto a las causas no patológicas se encuentran el aliento matutino, la menor salivación asociada a la edad, una higiene inadecuada en prótesis dentarias, el uso de determinados fármacos, los periodos de ayuno o dietas hipocalóricas así como la ingesta de determinados alimentos, como la cebolla o el ajo, o el consumo de alcohol.

Tratamiento de la halitosis

Esta patología provoca un fuerte impacto negativo en la autoestima y autoconfianza del afectado, pero según ha expuesto el odontólogo Luis Calatrava en el I foro de Sanitas de Odontología, "es un problema que tiene tratamiento".

El tratamiento oral está orientado a disminuir el número de bacterias productoras de mal olor presentes en la boca y a eliminar los compuestos malolientes. Entre las recomendaciones de los expertos para prevenir el mal aliento se encuentran la limpieza dental profesional, la higiene bucodental, no fumar, beber alcohol con moderación, no permanecer muchas horas sin ingerir alimentos ni bebidas no azucaradas, consumir grasas con moderación e incrementar el consumo de verduras crudas, que ayudan a proteger las encías.

Las embarazadas son las más afectadas

Un 7,8 por ciento de las embarazadas reconoce verse afectado por esta patología, según el estudio Sanitas de salud bucodental 2016. La halitosis en estas personas está asociada a cambios hormonales que se producen durante la gestación, que hacen que las encías se hinchen. Esta inflamación produce la acumulación de bacterias en la bolsa periodontal, dando lugar a la putrefacción del contenido de dichas bolsas periodontales, lo que causa el sangrado y el mal aliento.

Los expertos aconsejan realizarse un chequeo específico en cuanto se sepa que se está embarazada y visitar al dentista en las distintas etapas del embarazo. Asimismo, se debe intensificar la higiene con cepillados regulares y uso del hilo dental así como seguir una alimentación equilibrada.