l relato de la historia de las cinco generaciones del Nissan Micra se explica en relación a los gustos, las necesidades y las expectativas de los clientes. Factores como el cambio de tendencia en los productos de consumo, la música, la moda, la arquitectura o la tecnología de cada generación han modelado la evolución de este coche compacto.
¿Cómo se han manifestado estos cambios en el aspecto exterior e interior del Nissan Micra a lo largo de 35 años? Para encontrar la respuesta, Nissan Iberia ha viajado a Milán, capital del diseño, donde ha contado con la visión de Davide Tealdi, experto en diseño y marketing y profesor del prestigioso Instituto Europeo de Diseño (IED).
El primer Micra llegó en la década de los 80. Fue pionero en su segmento y un éxito desde su lanzamiento al mercado. «Se caracterizaba por un diseño racional, líneas cuadradas, un espacio generoso y una excelente visibilidad». El mismo año en el que tenían lugar los Juegos Olímpicos de Barcelona, Nissan presentó la segunda generación del Micra y su comercialización llegó por primera vez a la península. Según Tealdi, «el diseño de líneas más suaves, con innovaciones tecnológicas típicas de segmentos superiores y una geometría más emocional conectó con un público más joven y con ganas de expresarse. Gracias a ello, logró convertirse en un verdadero producto de culto». Fue la primera generación Micra producida en Reino Unido, con más de un millón de unidades fabricadas.
Cuidado por el detalle
La tercera generación radicalizó sus líneas curvas y presentó un estilo más deportivo que su predecesor. «El diseño estaba pensado para transmitir sensación de tranquilidad y complicidad a los conductores. Ofrecía más espacio en la cabina y se prestó especial atención a los detalles tanto del interior como del exterior, perfilando un estilo único y distintivo. Tener un Micra era motivo de diferenciación», apunta Davide Tealdi. El tercer Micra fue el primero tras la creación de la Alianza Nissan Renault.
En la cuarta generación del Micra, «se mantienen las líneas curvas, pero a la vez se detecta la reintroducción de algunos elementos de racionalidad para así llegar a satisfacer las necesidades de un público más variado. La entrada de la Generación Z y la revolución digital ejercieron su influencia», apunta el experto en diseño automovilístico del IED Milán.
