Una pregunta que todos nos hemos hecho alguna vez al mirarnos a un espejo es por qué tenemos los labios rojos. Los labios son una parte de nuestro cuerpo esencial para comunicarnos y para comer, pero además llaman la atención por su color más o menos rojizo en la mayoría de nosotros. ¿Tiene esto una explicación científica?

¿Cuál es el motivo?

Según los expertos, existe una razón clara que justifica el color de nuestros labios. No es otra cosa que el hecho de que se trata de una zona con apenas 3 o 5 capas de piel que, además, son más finas. Si lo comparamos con la piel del rostro, que puede alcanzar las 16 capas, encontramos ya una diferencia notable que justifica el color de nuestros labios.

Los labios, al tener menos capas de piel y al ser esta más fina, hacen que la sangre de los vasos sanguíneos influya en el color, que es predominantemente rojo o rojizo. Es algo que se nota especialmente en las personas de piel clara, pues en las personas de piel oscura los labios tienen una proporción superior de melanina, lo que hace que los labios también sean más oscuros.

Otras curiosidades acerca de los labios

Los labios, además, pueden servir para identificar posibles molestias o daños en nuestro organismo. ¿Cómo? Pues prestando atención a su color. Si una persona tiene los labios especialmente rojos, más de lo habitual, puede estar relacionado con que esté experimentando algún tipo de problema gástrico y que se esté manifestando de esa forma. Si tiene falta de oxígeno o frío extremo, sus labios se verán morados.

Otra curiosidad es que no tienen glándulas sudoríparas ni vellos, lo que hace que el color rojo sea aún más visible. Este tono se ha asociado históricamente con una buena salud y de ahí surge precisamente la tradición femenina de pintarse los labios con labiales en tonos rojizos: la salud es belleza.