¿Por qué ´Otra dirección´?

Porque era necesario, y también para abarcar elementos que no habíamos pilotado en toda mi carrera.

¿A dónde nos llevará esa dirección?

No lo sé, pero por lo pronto vamos bien. Yo creo que si te estás quieto, te comen. No soy muy repetitiva en formulas, hago un Cuando tu vas pero también un Rutinas. Necesito probar límites.

"Y tras la niebla... voy a empezar", cantas en este nuevo álbum. Llego a plantearse dejar la profesión, bajarse del escenario. ¿La apatía ya quedo atrás?

Anímicamente estaba un poco de bajón de autoestima, algo normal en la carrera de cualquiera. El bajón se produjo por diferentes factores, mil cosas, ninguna en concreto. Aparte de lo bonito de mi profesión, también hay otras no tan bonitas que es el venderte la moto, no decirte las verdades, la decepción, o la sensación de no tener un disco porque crees que no vales. El artista necesita el aplauso y la palmada, pero el reconocimiento externo para sentir la seguridad es un fallo. Soy muy válida pero a veces una se olvida y te hacen creer que no vales pero siempre tienes algo y en este caso fueron las canciones. Mi hermano fue muy importante para que recuperara la ilusión.

Sin ataduras con ninguna multinacional y ajena a contratos leoninos, ¿se siente liberada?

Ahora tengo un conocimiento de lo que estoy haciendo y por lo que estoy luchando y sé que todo eso lo provoco yo. Hay una responsabilidad extra. Todo mi sobresfuerzo es para un equipo muy chiquito que no molesta a nadie ni quiere comérselo todo. No soy una tipa diplomáticamente correcta, nunca lo he sido, y eso me ha provocado que en doce años tenga lo más importante de mi carrera: la credibilidad. Hay dos cosas que nunca se me van a mover: que canto bien y que tengo palabra. No soy de grises, no juego con el tiempo de la gente ni con tu ilusión. También he aprendido a no esperar lo mismo de los demás.

¿Qué tiene ´Arrested´ que le da alas?

Pureza. Es una canción que empieza con un acorde y logra que quieras escuchar lo que viene después. Esta fue la canción que me movió el suelo. No encontraba canciones que me movieran, todo un problema, y esta, que me la trajo mi hermano, que sabía lo que yo necesitaba cantar, me descubrió el camino. "Agarra un avión y a Londres", me dijo mi hermano. Y así me llevo, de los pelos.

¿Cómo valora la respuesta del público un mes después de publicar nuevo disco?

La respuesta ha sido abrumadora, sabía que había ganas, porque hacía cuatro años que no sacaba disco, pero tal y como está el patio no me esperaba una reacción tan positiva y tan emocionante para mí. Para nuestro sello, Alias Music, fabricar y todo eso es un trastorno, pero felices.

Que nadie piense que ha estado de brazos cruzados los últimos cuatro años.

En ese tiempo saque un Ep digital, para probar nuevos sistemas, porque hay que empezar a reeducar al público; hice un año de radio; estuve en Increíbles de A-3 con Carlos Sobera, Mario Vaquerizo y Santiago Segura; y el último año y medio lo dedique al repertorio, a grabar y retomar las clases de canto. En definitiva, he estado con todo eso que no se ve. La seguridad te la da todo lo que haces para tener un buen pilar de trabajo.

¿Ha dicho clases de canto?

Si. Al haber en el disco partes en ingles quise reciclarme, así que agarre a Helen Rowson -profesora de las primeras temporadas de Operación Triunfo- y, como es de Liverpool, no me paso una. Todo el mundo está feliz con mi pronunciación en ingles, pero me la he currado.

Tampoco es una novata en este campo.

No. Tengo el oído muy acostumbrado al punto anglo. Me gusta. Mi madre es profesora de inglés, en casa somos fanáticos de Beatles y desde el principio siempre hice versiones en inglés. Es un idioma que me apetecía, y de hecho es una curiosidad dentro del disco: hay 19 canciones, ocho de ellas en ingles, que son las mater, es decir, como llegaron con la maqueta, como fueron paridas. Posteriormente se realizó un trabajo que no consistió en traducir la historia, sino en crear una diferente, una canción distinta, con la métrica, que es lo complicado, pues hay tipos de tempos muy anglos y el español es muy duro en este sentido. Para que no sonaran ridículas conté con Alfonso Samos, mi mano derecha. Con el trabajamos durante meses y meses, armados de paciencia.

¿Qué le han ensenado sus nuevas canciones?

Yo soy una persona que cuando va al estudio no edita. Al hecho de grabar una frase y cortar, grabar una frase y cortar, sucesivamente, en un estudio se llama editar. Yo no lo hago porque canto en vivo, necesito cantarlas de principio a fin, ver donde respiro, probarla antes sólo con guitarra. Me exigí cantarlas con el instrumento antes de nada. Al llegar al estudio, los tempos que ya tenían manejados los productores, !seis en total!, me hacían cantar mas ritardando, algo que hacen mucho los negros y que es muy complicado. Se basa en el temple, yo soy muy nerviosa y canto muy rápido, como si siempre quisiese acabar la canción. Así que tuve que apaciguar eso, o cambiar el orden de grabación, ya que había días que estaba más nerviosa que otros. Por razones de presupuesto tuvimos que grabar 16 temas en siete días. Todos los coros son míos, todo lo he hecho yo. Aprendí a hacer segundas y terceras voces, armonías...

¿Qué es lo mejor que le ha pasado en 22 años de carrera?

Poner a prueba mis principios, algo que me gusta, la perseverancia, pero todo eso se aprende después de 22 anos. El artista tiene que cuidar su ilusión, que no le envenenen, que tenga oportunidad de vivir.

¿Qué le reprocha Laura a Chenoa?

No soporto que no le dé tiempo personal y le quite el anonimato, pero eso es parte de la profesión. Laura es otra onda, es más sencilla, de leer, de pequeñas cosas, muy ermitaña, muy poco sociable, poco amiga de las fiestas... El punto de exposición de Chenoa es agotador.

Como diplomada en educación infantil, ¿canta con la camiseta verde anti-TIL?

Tengo amigas que están en esa lucha y sé que no lo están pasando bien.

¿Chenoa está notando la recuperación económica de la que hablan los gobernantes, porque si hay un sector tocado, ese es el musical?

No, ni yo ni nadie, cantar victoria antes de tiempo es muy complicado. Tendrían que ir con más tacto. No es bueno ir con cucharaditas. Tengo amigos en el paro, con depresión. Soy muy de a pie de calle y sé como están. Yo no veo mucha recuperación. Y en lo que se refiere a mí, yo soy una superviviente. Para hacer un show de hora y media con solo dos guitarras, hay que tener muchas tablas.