Más allá de Di Caprio o las Kardashian... y los 1.000 botes de lubricante: las fiestas salvajes de Sean 'Diddy' Combs eran un pozo de abusos y violaciones

Después décadas saliéndose de rositas, esta vez decir que es "inocente" ante la jueza parece que no le va a funcionar

El rapero Puff Daddy detenido por diez demandas de acoso sexual, abusos y violación

Sara Fernández

Laura Estirado

Dicen que el rapero Sean 'Diddy' Combs no prueba bocado en el Centro de Detención Metropolitano de Brooklyn, adonde duerme desde el 16 de septiembre, cuando fue detenido tras 10 demandas de acoso sexual [a fecha de publicación de este artículo ya son 11 en total], abusos y violación, registros de sus propiedades por parte del FBI e incluso de una condena de 100 millones de dólares por no presentarse a un juicio en el que un hombre le denunció por drogarle y violarle en 1997. El famoso compositor, productor discográfico, actor y empresario nacido en Harlem el 4 de noviembre de 1969, al que también se conoce como Puff Daddy, Diddy y, últimamente Brother Love [no se puede ser más cínico], tiene miedo de que alguien le envenene.

Aseguran que está "paranoico" y "asustado". Después décadas creyéndose el p* amo y saliéndose de rositas, esta vez decir que es "inocente", ante la jueza, y mediante un comunicado en X, parece que no le va a funcionar.

La pena mínima que enfrenta Diddy es de 15 años de cárcel por el delito de tráfico sexual, pero le puede caer la perpetua. Sus abogados han pedido, sin suerte, que espere el juicio, el próximo 12 de noviembre, fuera de la cárcel. Ofrecían una fianza de 50 millones de dólares. Pero la jueza Robyn Tarnofsky se ha negado.

#MeToo en la música

Después de que el #MeToo hiciera aflorar los depredadores sexuales en el mundo de Hollywood (Harvey Westein o Kevin Spacey) y el mundo de la política y las grandes fortunas (Jeffrey Epstein), parece que le ha llegado el turno a la industria musical, mayoritariamente controlada por hombres. Es cierto que desde hace tiempo hay un goteo constante de denuncias de abusos, pero hasta ahora no se han rendido todas la cuentas, se ha mirado para otro lado y no se ha hecho justicia con las víctimas.

El 'DiddyGate' coincide estos días en las portadas de la prensa mundial con otras historias de hombres depravados, como el caso del dueño de Harrods y exsuegro de Lady Di, Mohamed Al-Fayed, que falleció hace un año, pero al que ahora una investigación de la BBC ha revelado que abusó y violó a más de 20 mujeres, o el terrible caso del 'monstruo de Mazan', Dominique Pelicot.

Cascada de denuncias

La última denunciante de Combs ha alzado la voz el martes de esta semana. Thalia Graves ha demandado al rey Midas del hip hop y ganador de cuatro Grammys por abuso sexual y violación, en la que es, de momento, la denuncia número 11 en menos de un año. En rueda de prensa ha detallado entre lágrimas las graves secuelas que ha padecido por culpa de Combs, y también del guardaespaldas de este, llamado Joseph Sherman. Según contó, abusaron sexualmente de ella y también la violaron. La habían drogado previamente, y lo grabaron todo. Corría 2001.

La primera denuncia contra el músico fue en noviembre de 2023, cuando su exnovia, la artista Casandra Ventura, 'Cassie', hizo públicas sus violaciones, palizas y abusos -la obligaba a participar en orgías y consumir drogas- en una demanda que se resolvió en un día tras un acuerdo extrajudicial.

'Freak off parties'

Después de este escándalo empezaron a conocerse más casos y querellas. La mayoría de mujeres, pero también algún hombre, como un exactor porno que lo acusa de utilizarlo como "esclavo" sexual. Las víctimas relatan un mismo modus operandi.

A finales de marzo, el FBI registró las mansiones de Combs, en Los Ángeles y en Miami. Los agentes encontraron muchas cámaras en las habitaciones, nueve armas AR-15 (tres de ellas con los números de serie desdibujados) y muchos de los suministros que se utilizaban en las famosas fiestas salvajes ('freak off parties') que organizaba el rapero: narcóticos y más de mil botellas de aceite para bebé y lubricantes.

Sean 'Diddy' Combs explicó en una entrevista de 2002 con el presentador Conan O’Brien cómo organizaba aquellas bacanales. Entre risas describió que necesitaban cerraduras "para mantener a las mujeres allí". "Mujeres, mujeres hermosas, por supuesto", añadió al asegurar que también había muchos hombres y que se necesitaba "mucho alcohol". 

Los fiscales han detallado que aquellas 'celebraciones' a menudo se prolongaban durante varios días y se drogaban a mujeres para mantenerlas "obedientes" para que participaran en actividades sexuales. También se ha revelado que Combs no solo observaba estos actos, sino que en ocasiones se masturbaba y grababa todo en vídeo, sin consentimiento alguno (por supuesto). Este material audiovisual luego se usaba para chantajear a sus víctimas, para que callaran o siguieran participando en más 'freak off parties'.

'Fiestas blancas' hollywoodienses

Muchos años antes, en los 90, Puff Daddy se hizo famoso por otro tipo de fiestas, las 'White parties'. Por ellas pasó casi todo Hollywood, y también eran famosas por sus excesos (mucha droga y mucho sexo). Entre los invitados, según varios medios que estos días han vuelto a rescatar las fotos de aquellos encuentros, hay nombres como Leonardo DiCaprio, Paris Hilton, Denzel Washington, las Kardashian, Mariah Carey, Jay Z, Ashton Kutcher, Usher, Pink, Ben Stiller o el mismísimo príncipe Enrique. En ellas era indispensable acudir vestido de color blanco y muchas veces se celebraban el Labor Day (el Día del Trabajo en EEUU), el primer lunes de septiembre.

Jennifer Lopez, que fue pareja de Diddy entre 1999 y 2001, asistió a varias de sus fiestas, al igual que Naomi Campbell y Cameron Díaz, que también salieron con el productor musical.

Tanto ellas como Jay Z y Beyoncé, que también fueron fotografiados con el rapero, guardan silencio por ahora. No es el caso de Leonardo DiCaprio, cuya foto, en 1998, en una de las exclusivas reuniones en la mansión de Combs de East Hampton, ha vuelto a resurgir con fuerza. Sin embargo, el actor, que hoy tiene 49 años, ha querido desvincularse del músico. Fuentes de su entorno aseguran que DiCaprio "no ha estado en contacto con Diddy desde hace años" y que, aunque asistió a algunas de sus fiestas en el pasado, "no tuvo nada que ver con las actividades ilícitas que se le imputan al rapero".

Mentor de Bieber

Justin Bieber es la última derivada del escándalo del rapero. La red social X y TikTok están llenas de vídeos de la época en que Sean 'Diddy' Combs se convirtió en mentor del artista canadiense. Por ejemplo, cuando el intérprete de 'Baby' tenía 15 años y pasó varios días con productor. Los fans de Bieber están elucubrando sobre si el rapero podría haber abusado de él o forzado a consumir alcohol u otras drogas.

Al cantante, que acaba de ser padre de su primer hijo junto a Hailey Baldwin, se le oye decir que iban a ir a "buscar algunas chicas" para pasar el día, lo que ha llevado a algunos a pensar si Bieber vivió entonces algunos de los episodios de los que se acusa ahora 'Diddy'.

Suscríbete para seguir leyendo

Tracking Pixel Contents