El presidente ruso Vladímir Putin es bastante celoso de su vida privada y la mantiene en la más estricta intimidad. Poco se sabe de sus amoríos desde que se divorció, en abril de 2014, de Lyudmila Aleksándrovna Ocheretnaya Urinha (cuyo nombre de casada era Lyudmila Putin Urinha), la única mujer con la que Putin se casó y la madre de sus dos hijas reconocidas.

Existen rumores de que Vladímir tiene una tercera hija con la exgimnasta rítmica rusa Alina Marátovna Kabáyeva, con la que supuestamente vive desde 2015 en una zona de máximo lujo en las afueras de Moscú llamada Rublievo.

Gimnasta condecorada

Alina Kabáyeva, de 35 años -Putin tiene casi el doble, 69 años- es una leyenda en Rusia. Campeona olímpica, es una de las deportistas más condecoradas en la historia de la gimnasia rítmica, con 2 medallas olímpicas, 14 medallas del Campeonato del Mundo y 25 medallas del Campeonato de Europa. También ha sido actriz, modelo y diputada del Parlamento ruso durante siete años, hasta 2014.

La entonces gimnasta rítmica rusa Alina Marátovna Kabáyeva, durante una competición en Nueva York, en 1998. REUTERS

Comenzó a practicar gimnasia rítmica con tan solo 4 años en su Uzbekistán natal, una de las antiguas repúblicas de la Unión Soviética. Con solo 15 años tuvo una sorprendente victoria en los Campeonatos de Europa, celebrados en Portugal, siendo la más joven de un equipo con reputadas estrellas como Amina Zaripova.

Alabanzas de la entrenadora

"No podía creerme lo que veían mis ojos cuando la vi por primera vez. La chica tenía una rara combinación de dos cualidades cruciales en la gimnasia rítmica: flexibilidad y agilidad", dijo de ella la entrenadora Irina Víner.

En octubre de 2004 Alina anunció su retirada del deporte, aunque unos meses después Víner anunció su posible retorno, una efeméride que se materializó en una competición amistosa entre Italia y Rusia disputada en Génova, el 10 de septiembre de 2005.

En 2007 se retiró definitivamente de la gimnasia artística profesional y entró como diputada del Parlamento ruso como miembro de Rusia Unida. Tras su retirada del Parlamento, en 2014, asumió la presidencia del consejo de administración del Grupo Mediático Nacional (NMG), fundado por alguien muy cercano a Vladimir Putin.