La famosa cupletista barcelonesa Carmen de Mairena ha fallecido este domingo en un hospital de Barcelona "por causas naturales" a los 87 años, según informa su propio perfil en Instagram.

Miguel Brau Gou, que era su verdadero nombre, se había convertido en una celebridad especialmente por sus participaciones en programas televisivos como 'Crónicas Marcianas'.

"Siempre en nuestros corazones", recogía una esquela audiovisual compartida por la cuenta oficial de la recién fallecida en Instagram en la que se incluía el mensaje: "sus familiares y amigos íntimos queremos agradecer todos los mensajes de apoyo y cariño que ha recibido por parte de todos los que la queríais y recordabais durante estos últimos años".

Esos familiares y amigos añadían: "Carmen se ha ido llena de amor, mimada y cuidada por nosotros, sus seres queridos más cercanos. Hoy brilla una estrella más en el firmamento, la estrella de una mujer libre, fuerte, valiente y luchadora, que ha sido y será un icono LGTBIQ, dando visibilidad y luchando por los derechos del colectivo en épocas muy duras y difíciles".

Tras muchas penurias, Carmen de Mairena acabó sus últimos días en una residencia de Barcelona, ya convertida en un símbolo de toda una época, un personaje de 'Pink Flamingos', de John Waters, con una vida sórdida y dura.

Mairena luchó por ser mujer en la Barcelona de los 50, estuvo varias veces en la cárcel -"ser maricón iba contra Franco", decía-, y de donde salió con toda la cara llena de granos porque "un mariquita de la cárcel me depiló la cara y se me infectó. Entonces ya no podía hacer galas de artista", explicaba ella en un libro autobiográfico en 2017, realizado por la dibujante e ilustradora Carlota Juncosa y publicado por Blackie Books.

En ese libro, Juncosa recorría toda la vida de Carmen de Mairena, antes y después de inyectarse silicona, prostituirse, hacer una película con Javier Cárdenas, convertirse en una de las estrellas de 'Crónicas marcianas', ser una 'freak' de la tele o hacer guiños a la política.

En el prólogo de esa biografía ilustrada, el escritor barcelonés Javier Pérez Andújar resumía su figura: "De algún modo Carmen de Mairena es nuestra estatua de la Libertad, es decir, un símbolo que no tenemos".