El Rey Juan Carlos se ha convertido en uno de los protagonistas del número de diciembre de Vanity Fair. El periodista Alberto Pinteño ha realizado una ardua investigación para descubrir los secretos de la nueva vida del monarca tras la abdicación del pasado 2 de junio de 2014.

Uno de los temas más comentados entorno a la vida del Rey emérito es su pasada amistad con Corinna Zu Sayn-Wittgenstein, un hecho en el que ha profundizado Vanity Fair. A pesar de que las últimas apariciones de la aristócrata han sido muy contadas - una de sus últimas apariciones fue en Nueva York en la Global Clinton Initiative junto a Naomi Campbell- la publicación ha conseguido contactar con ella para que les dé su punto de vista sobre lo contado por el círculo más cercano del monarca.

Según Manuel Fuentes explicaba a Vanity Fair: "Corinna ha pasado a la historia. El Rey tomó la decisión de acabar definitivamente con esta relación. Fue una decisión del monarca, y con la que Corinna no estuvo muy de acuerdo", ante tal afirmación la alemana responde a la misma publicación: "Tal vez su entorno sintió la necesidad de tener la última palabra, querían darme una lección sobre lo que sucede cuando no haces lo que se te dice. Me parece muy triste. Nadie gana nada por denostar a otros. Es malo para todos. A día de hoy estoy concentrada en mi vida y dedicada plenamente a mi familia y a otros interesantes proyectos por todo el mundo".

Corinna: "Algunas personas difundieron desagradables rumores acerca de que yo no me quería ir"

Además, la que un día fuera la 'amiga entrañable' del Rey defiende su imagen: "He sido muy clara en mis declaraciones sobre nuestra amistad. Algunas personas difundieron desagradables rumores acerca de que yo no me quería ir, que estaba tratando de negociar algún acuerdo y que estaba resultando una persona difícil. Esto es categóricamente falso. Tan falso como la casa fantasma de Madrid".

Rey Juan Carlos con Corinna

Y es que el final de su amistad con el Rey Juan Carlos se produjo a finales de octubre del 2014, el mismo Fernando Ónega lo confirma a Vanity Fair: "Don Juan Carlos me llamó y me dijo: 'Quería decirte que lo de Corinna ya no existe".

Tras el final de esta estrecha amistad, Josep Cusí -armador y amigo íntimo de Don Juan Carlos- defiende lo ocurrido a publicación: "El Rey ha tenido mucho más mérito en corregir esta historia que en continuarla. Se equivocó y lo asumió. Corrigió su error. Y sí, esa persona ha desaparecido totalmente de nuestro mapa", y confirma que la figura de Corinna nunca fue del gusto ni agrado de su círculo más cercano: "Los que hemos estado verdaderamente a su lado, al lado de don Juan Carlos, hemos presionado para que eso fuese así. La lealtad consiste en eso y por ello el rey se ha quedado con los amigos leales, los que han sabido aconsejarle, no con los de peloteo".