El príncipe Guillermo, nieto de la reina Isabel II y segundo en la línea de sucesión a la corona británica, admitió hoy sentirse nervioso al llegar a su nuevo puesto como piloto de ambulancias aéreas en el sureste de Inglaterra.

El duque de Cambridge, de 33 años, llegó a las 6.00 GMT a su puesto en la East Anglian Air Ambulances (EAAA, siglas en inglés), con base en el aeropuerto de Cambridge, en el sureste de Inglaterra.

"Este es mi primer día y estoy sintiendo los nervios", dijo a los periodistas el hijo del príncipe Carlos y la fallecida Diana de Gales al presentarse en la base en un día lluvioso.

"Hubo mucho esfuerzo y paciencia en el entrenamiento, pero estamos aquí ahora y tengo ganas de hacer el trabajo", añadió.

El príncipe estará sujeto a turnos de trabajo y también hará un horario nocturno.

Sus labores incluyen trasladar a los hospitales a pacientes con emergencias médicas, sean de salud o por accidente de tráfico.