El accidente de avioneta que ha sufrido Harrison Ford, del que ha salido con heridas hasta el momento estimadas como leves, trae a la memoria otros episodios similares en los que los famosos consiguieron salvar su vida.

Considerable fue el susto que se llevaron la entonces presidenta de la Comunidad de la Madrid, Esperanza Aguirre, y el líder de la oposición, Mariano Rajoy, en diciembre de 2005. Ambos se subieron a un helicóptero durante un acto del PP en la plaza de toros de Móstoles. La nave se estrelló instantes después de despegar. Aguirre y Rajoy fueron rescatados en perfecto estado y ninguno de los ocupantes del helicóptero resultó herido.

Bono, el cantante de U2, también vio como un percance en un avión puso en riesgo su vida. Ocurrió en noviembre del año pasado, cuando una de las puertas se abrió y parte del equipaje se perdió en el aire. Finalmente, el piloto logró realizar un aterrizaje de emergencia.

Otro que sufrió otro buen susto fue Leonardo Di Caprio en 2010. El actor se encontraba en un vuelo hacia Moscú cuando uno de los motores del avión, que estaba a 9.000 metros de altura, se paró. La nave consiguió aterrizar en Nueva York y el actor agradeció al piloto y al personal de cabina que hubiesen llevado a cabo un aterrizaje seguro.

Sandra Bullock, en el año 2000, vio como el piloto que conducía la avioneta que la trasladaba de Texas a Wyoming tuvo que tomar tierra de forma apresurada en Wisconsin por una avería. Más traumático fue el siniestro de Travis Barker, batería de Blink 182, en el año 2008. El avión en el que viajaba se estrelló tras su despegue por un fallo en la presión de los neumáticos. Cuatro personas perdieron la vida y el músico no ha podido superar su pánico a tomar un vuelo durante las giras del grupo.

En 1998, el actor británico Orlando Bloom cayó desde una altura de tres pisos cuando la tubería por la que subía hasta el tejado de una casa se desprendió por el peso. Resultado: cuatro vértebras rotas y 18 meses de rehabilitación que no le impidieron llegar a tiempo para el rodaje de la primera parte de "El Señor de los Anillos".

Por lo que se refiere a accidentes de tráfico, destacan los casos de Arnold Schwarzenegger y Morgan Freeman. El protagonista de ´Terminator´, que tanta habilidad demostraba con las motos en la saga, se rompió seis costillas con su motocicleta en 2001, mientras el veterano actor afroamericano perdió la movilidad en su mano izquierda tras un accidente de tráfico en el estado de Misisipi. El vehículo dio varias vueltas de campana y cayó a un terraplén tras salirse de la carretera. Y dos accidentes de tráfico ha sufrido también el cómico inglés Rowan Atkinson, que ha estrellado en sendas ocasiones su McLaren F-1.