De Lita Cabellut (Sariñena, Huesca, 1961) se ha hablado mucho, sobre todo de su controvertida biografía, desde que en 2015 apareciese como la única española en la lista de los 500 artistas vivos más cotizados, elaborada por la plataforma privada ArtPrice. Lo que ella misma suele minimizar como “un ejercicio de marketing muy lejos de lo que realmente es el arte”, permitió que su nombre se diera a conocer en un país, el suyo, con una enorme tradición pictórica y que apenas sabía de su existencia.