El dormitorio es el espacio más importante de cualquier casa. Nuestra habitación debe ser ese "santuario" que nos ayude a relajarnos después de un duro día de trabajo. Por ello hay que prestar especial atención al diseño que elegimos para nuestro dormitorio.

Al ser el espacio en el que pasamos más horas, los dormitorios son una de las partes de la casa que más se reforman. Con el paso del tiempo los muebles se van rompiendo, desgastando o simplemente nos aburrimos del diseño y queremos dar una aire nuevo a la habitación. Si estás pensando en reformar el dormitorio, sigue estos pequeños consejos.

Elige un color para las paredes que vaya con tu estilo. Con una nueva capa de pintura en las paredes conseguirás transformar totalmente una habitación. Esta temporada los tonos grises son los que marcan tendencia. Estos colores darán a tu dormitorio un toque elegante y a la vez sencillo.

A la hora de reformar un dormitorio escoje un objeto o mueble y conviértelo en el centro de tu diseño. Puedes ser algo que ya tengas en tu dormitorio y quieras conservar o un muebles que hayas visto en una tienda y del que te has enamorado.

Fíjate también en las piezas que tienes en tu habitación: el armario, las mesitas, el cabecero de la cama, etcétera. Si están en buen estado puedes aprovecharlas en tu nuevo dormitorio con una capa de color.

Foto: Dearlillieblog

En este caso se han aprovechado la mayoría de piezas de la habitación. El espejo, los cabeceros de las camas, la mesita y la silla se han aprovechado gracias a una pequeña mano de pintura. Las colchas de las camas también se mantienen en la reforma de este dormitorio, que se convierte en otro totalmente distinto gracias al papel pintado y a pequeños detalles como la lámpara de araña o las flores.

Los detalles son una parte importante a la hora de reformar un dormitorio. Podrás conseguir una habitación de revista gracias a cojines, plantas, cuadros o cualquier otro accesorio que vaya con tu estilo.

Foto: Dearlillieblog

Si tu habitación cuenta con grandes ventanas, como en este caso, puedes aprovechar y pintar las paredes de un color más oscuro para después cambiar las típicas cortinas por estores enrollables y dejar pasar la mayor luz solar posible. De esta manera conseguirás que el dormitorio parezca más grande a la vez que le das un toque más original.