El ex presidente de EEUU George W. Bush dijo el lunes, en su primera entrevista televisiva tras dejar la Casa Blanca, que fue una voz "disidente" en su Gobierno contra la guerra en Irak, aunque finalmente decidió apoyarla.

"Era una voz disidente. No quería utilizar la fuerza" contra Irak, confesó Bush en una entrevista con el presentador Matt Lauer, de la cadena de televisión NBC. Las declaraciones llegan un día antes de la publicación de sus memorias Decision Points (Momentos decisivos) que salen mañana a la venta.

Además, Bush defendió las prácticas de tortura del ´ahogamiento simulado´ ´ en el campo de prisioneros en Guantánamo y las calificó de morales, legales y eficaces.

Según los extractos de la memoria, Bush dice que todavía siente "náuseas" cuando piensa que no se encontraron armas de destrucción masiva en Irak, el argumento que se utilizó para justificar la invasión del país en el 2003. "Quiero decir definitivamente que el mundo es mejor sin Saddam Hussein en el poder, en vista de que hay 25 millones de personas que ahora tienen la posibilidad de vivir en libertad", indicó. Añadió que como presidente uno no tiene el "lujo" de mirar hacia atrás en el tiempo.

Decision Points refleja su vida y ocho años en la Casa Blanca, cubriendo temas que van desde el abandono de la bebida, su reacción emocional frente a los atentados del 11 de septiembre de 2001, Irak, así como su controvertida política de emplear duros métodos de interrogatorio a presuntos terroristas.

Irak sigue siendo considerado como el mayor legado de Bush, para bien o para mal. "La historia lo juzga a uno en base a su decisiones. A veces, la historia no quiere juzgar a uno en ausencia de una decisión".

Bush sostuvo que no cree que debe una disculpa por la invasión a Irak, porque no se hallaron allí armas de destrucción masiva, pero indicó que sigue comprometido en determinar por qué la inteligencia se equivocó. "Dar disculpas sería básicamente decir que la decisión fue una decisión equivocada. Y no creo que lo fuera".

El ex presidente, sin tapujos, se mostró acorde con las torturas en Guantánamo. Sin la aplicación de "métodos de interrogatorio ampliados" se habrían producido más ataques terroristas contra Estados Unidos, reflexionó, y describe el ahogamiento simulado como "método eficaz", que ha permitido recopilar una gran cantidad de información y evitaron que se llevaran a la práctica planes terroristas para atacar el aeropuerto londinense de Heathrow así como varios objetivos estadounidenses dentro y fuera del país..

Bush dijo que el recuerdo más vivo del 11 de septiembre de 2001 fue cuando estaba sentado en una escuela de Florida con niños que escuchaban un libro que les estaba leyendo, cuando su jefe de gabinete, Andrew Card, le dijo al oído que un segundo avión había impactado contra el World Trade Center.

"Mi primera reacción fue enojo. Y entonces miré a los niños, y su inocencia en contraste con la maldad de los atacantes se me hizo obvia. Y me quedó claro que mi trabajo era protegelos".