Cuando Cela ganó el Nobel, le preguntaron la opinión a Cabrera Infante. El enfermo de castroenteritis replicó crípticamente que el escritor y el galardón "son tal para cual". He refrescado esta frase a raíz de la concesión a Juan Marsé del Planeta, o tal parecía por su ímpetu en monopolizar los fastos, aunque es difícil que vuelva a escribir una novela tan mala como La muchacha de las bragas de oro -alusión directa al rédito que obtuvo de ella-. Su furia desorbitada me recordaba a Saramago, cada año que no recibe una llamada de Suecia. En el otro rincón, la victoria de nuestra compatriota Maria de la Pau Janer suscita una serie de interrogantes. Como de costumbre, vamos a resolverlos gratuitamente. O casi.
¿Ha ganado Janer el Planeta pese a ser una mala escritora? No. Ese premio recayó, sin ir más lejos, en Lucia Etxebarria, por lo que no se atiene a criterios de calidad.
¿Ha ganado Janer el Planeta porque es una mala escritora? No. Hay centenares de novelistas pésimos que nunca ganarán el Planeta, pese a que se han esmerado en escribir libros que no tienen nada que envidiar a los peores que usted pueda concebir.
¿Es Janer una mala escritora? Cuando alguien escribe de lo que sabe, siempre lo hace bien. Janer fracasaría si intentara ser Virginia Woolf. Y viceversa.
¿Premiaría usted a Janer? Ya lo hice. Formé parte del jurado que le concedió el premio Ciudad de Palma de relato breve.
¿Es sorprendente que Maria de la Pau Janer gane el Planeta? No. Se puede afirmar que lo merece sin necesidad de leer el libro concreto que ha sido premiado.
¿Es sorprendente que Marsé esté en el jurado títere del Planeta? Sí, por lo que es él quien incurrió en contradicción.
¿Invitaría usted a Juan Marsé a una fiesta en su casa? Bajo ningún concepto. Peca de estridente y sobreactuado, he aprendido a desconfiar de quienes necesitan tanto estrépito para manifestar sus ideas.
¿Cuál es el prestigio real del Planeta? Cien millones de pesetas de prestigio.
¿Aceptaría usted cien millones de pesetas a cambio de encajar los insultos de Marsé, como ha hecho Janer? Por cien millones, estoy dispuesto a que me insulte Angel Acebes.
¿Rechazaría alguien el Planeta, por ser un premio comercializado y de sospechosa dilucidación? Ningún escritor español a excepción de Pérez-Reverte, que lo rechaza anualmente.
¿Rechazaría alguien el Planeta, dado que ha recaído en Janer? Ningún escritor lo rechazaría, ni aunque el ganador anterior fuera José María Aznar.
¿No es más decente limitar la audiencia a unos pocos lectores fieles, y no traicionarse? No creo que tenga usted la posibilidad de elegir, pero admito que es una magnífica excusa. Yo tampoco voy a prostituirme para publicar en The New York Times.
¿Ha ganado Janer el Planeta de derechas pese a ser de izquierdas? Ella ya ha precisado que sólo fue de izquierdas mientras gobernó el Pacto de Progreso.
¿Por qué piensa Janer que su sexo puede haber influido en la virulencia de las críticas que ha recibido? Porque cuando se convocan unas elecciones a juez decano, y se presentan dos mujeres y un hombre, todos sabemos de antemano el sexo del ganador.
¿Qué relación le liga a Maria de la Pau Janer? Tuve una intervención decisiva, aunque estrictamente profesional, en su vida emocional. No consigo odiarla como desearían sus enemigos. No consigo odiarla. Tampoco la quiero tanto como Matas.
¿Es más escandaloso el veredicto del Planeta o la elevación a consellera de la presidenta de la Casa de Extremadura en Balears? La inclusión en el Govern de la Casa de Encarna en Balears, equivale a que Carmen Posadas ganara el Planeta. Así lo demuestra el entusiasmo perfectamente descriptible de los técnicos autonómicos obligados a emigrar con ella.
Cierra la tienda de Burberry que ennoblecía el Borne palmesano, y que será sustituida por un establecimiento de la firma Hugo Boss. La firma británica que inventó la gabardina, y que equipó las expediciones polares de Roald Amundsen, cede el terreno a la marca alemana. Desde las tumbonas en los hoteles hasta la cerveza en los bares, pasando por la compra de fincas y propiedades, Inglaterra y Alemania libran una peculiar contienda en Mallorca. También en la vertiente de la moda -el rollo caza del zorro contra el rollo matrix, como si dijéramos-. En cualquier caso, si tu problema no es amar más al dinero que a los amigos, sino tener menos dinero que amigos, es mejor que pienses en vestir algo más llevadero.
El domingo pasado les informábamos de que "Matas navega con el presidente del Supremo". Y así era, en efecto, salvo que un lamentable error adjuntó al cargo el nombre de su predecesor al frente del Tribunal, fruto todo ello de una pésima utilización por mi parte de los recursos de Internet. Quede claro pues que, tal como se desprendía de la crónica, fue Francisco José Hernando -titular vigente del Supremo y del Consejo General del Poder Judicial- quien disfrutó el sábado 8 de octubre de una placentera jornada navigatoria en yate por aguas de Cabrera, en compañía del político del PP.
Uno de los yates favoritos de Matas para ejercer de anfitrión con sus distinguidos huéspedes es el Patrina, propiedad de Gabriel Escarrer, si bien más de un empresario con barco en Mallorca lo coloca al servicio de los políticos conservadores -incluido Bono-. En agosto de 2003, el president ya efectuó un crucero a bordo de la nave del presidente de Sol Meliá, en compañía de Rajoy y Zaplana. Por aquel entonces, Aznar meditaba en Menorca la identidad de su sucesor -anunciado a la vuelta de las vacaciones-, y el futuro ganador remoloneaba por aguas baleares. Si los camarotes hablaran.
Reflexión dominical omnipotente: "Puedes ordenar a diario la salida del Sol, a condición de que lo hagas a la hora adecuada".
