Ciencias atmosféricas

Los isótopos de los árboles confirman la excepcionalidad histórica de las sequías europeas

Han permitido reconstruir el hidroclima continental desde el año 1600 hasta hoy

Los anillos de los árboles no sirven solo para conocer su tiempo de vida: las proporciones de isótopos en la celulosa del tronco del árbol son indicadores de sequía o humedad en el momento del crecimiento del árbol.

Los anillos de los árboles no sirven solo para conocer su tiempo de vida: las proporciones de isótopos en la celulosa del tronco del árbol son indicadores de sequía o humedad en el momento del crecimiento del árbol. / GFZ.

Redacción T21

Los isótopos de los árboles han constatado que las sequías de verano de 2015 a 2018 en Europa fueron los eventos más extraordinarios de esta naturaleza ocurridos en los últimos 400 años y confirman el impacto de la actividad humana en el calentamiento global.

Investigadores de la Universidad Libre de Berlín han comprobado que las sequías de verano que han asolado partes de Europa en los últimos años fueron en realidad muy inusuales en comparación con las sequías experimentadas durante los últimos siglos.

En su estudio, el grupo de investigadores aplicó un método novedoso de análisis utilizando datos de isótopos, cuyos resultados han sido publicados en la reconocida revista Communications Earth & Environment.

Los registros de isótopos estables en los anillos de los árboles son huellas dactilares muy sensibles al clima de las condiciones de humedad del verano. Son en gran medida independientes de las especies de árboles, la edad de los árboles y su ubicación.

Esto significa que los isótopos estables de los anillos de los árboles difieren de los parámetros dendrocronológicos clásicos del ancho de los anillos de los árboles y la densidad de la madera, destacan los investigadores.

Cambios hidroclimáticos

Las últimas décadas han visto un aumento en el número de inundaciones y sequías experimentadas en toda Europa. Sin embargo, hasta ahora se sabía poco sobre los cambios hidroclimáticos a largo plazo que tenían lugar en todo el continente.

El equipo de investigación creó una reconstrucción del campo climático basada en isótopos estables de anillos de árboles que se extiende por todo el continente europeo.

Este método permite realizar reconstrucciones del hidroclima de verano europeo desde el año 1600 de nuestra era (EC), así como deducir información sobre las precipitaciones en Europa durante los últimos siglos.

Extracción mínimamente invasiva de una muestra de madera de un tronco de árbol vivo para analizar sus isótopos.

Extracción mínimamente invasiva de una muestra de madera de un tronco de árbol vivo para analizar sus isótopos. / G. Helle/GFZ.

Cuatro fases

El estudio identificó cuatro fases diferentes del hidroclima europeo durante los últimos 400 años: desde 1600 hasta alrededor de 1650 (comienzo del Mínimo de Maunder) hubo inicialmente una fase con un clima bastante húmedo.

Luego siguió un período bastante árido, con sequías prolongadas durante unos doscientos años hasta alrededor de 1860 (final de la Pequeña Edad de Hielo).

Desde alrededor de 1875, finalmente siguió una fase con un clima de verano más suave, que se prolongó hasta mediados del siglo XX.

Desde entonces, los investigadores han observado una tendencia hacia condiciones más secas que pueden estar relacionadas con el calentamiento de los gases de efecto invernadero producidos por la actividad humana.

Impacto en Europa

Al comparar la consistencia estacional y la mayor sensibilidad climática de los registros de isótopos de los anillos de los árboles con los registros tradicionales de los anillos de los árboles, el estudio descubrió que las recientes sequías de verano en Europa de 2015 y 2018 fueron completamente anómalas en un contexto de varios siglos y sin precedentes para gran parte de Europa central y occidental.

Esas sequías fueron dos de los eventos más extraordinarios de los últimos 400 años y sin precedentes para gran parte de Europa central y occidental, revela el análisis atómico de los árboles.

Sin embargo, se han producido sequías de varios años con frecuencia en los siglos XVII y XVIII, aunque no tan graves como las de 2015 y 2018.

Además, los registros de isótopos para todos los anillos de árboles registrados como parte del estudio demostraron un cierto nivel de sensibilidad a las condiciones de sequía de verano, independientemente del tipo, la altura y la ubicación geográfica del árbol, destacan los investigadores.

Referencia

European tree-ring isotopes indicate unusual recent hydroclimate. Mandy B. Freund et al. Communications Earth & Environment, volume 4, Article number: 26 (2023). DOI:https://doi.org/10.1038/s43247-022-00648-7