El Futuro Es Ahora (10)

El arte entra en una nueva era con la Inteligencia Artificial

No hay que tener ninguna habilidad artística para crear obras fascinantes con ayuda de DALL-E2, MidJourney o ChatGPT

Una muestra de la creatividad de la Inteligencia Artificial.

Una muestra de la creatividad de la Inteligencia Artificial. / DALL·E 2

Miguel Ormaetxea Arroyo

Es bastante probable que, en este recién estrenado año 2023, el arte experimente la mayor revolución de su historia. Ya no serán necesarias habilidades o talentos específicamente artísticos para crear grandes obras gracias a nuevas herramientas dotadas de Inteligencia Artificial.

Hace unos 40.000 años, una mujer neandertal se adentró valiente en una profunda cueva con una antorcha humeante de sebo, una bolsita con óxido de hierro y una pequeña caña. Sobre la clara superficie de una roca, apoyó su mano izquierda y con la otra sopló el pigmento rojo sobre su mano.

Había visto hacer algo parecido a unos extraños seres de una raza menos robusta, que estaban adueñándose de sus territorios tradicionales. Tal vez pensaba llamar de esta forma en su auxilio a los espíritus, su mano tentaba el más allá, como un grito.

Muchos miles de años después, se ha encontrado un enjambre de manos similares en distantes lugares del planeta. La muda llamada milenaria se ha interpretado por muchos como la primera manifestación de arte.

Si arte es la capacidad que tienen algunas obras de generar impresiones o emociones en quienes las contemplan, se ha convertido en una lucrativa y a veces sorprendente, casi errática, industria que factura más de 65.000 millones de dólares anuales.

Impresiones en la Cuevas de las Manos sobre el Río Pinturas en la provincia de Santa Cruz, Argentina.

Impresiones en la Cuevas de las Manos sobre el Río Pinturas en la provincia de Santa Cruz, Argentina. / Mariano.

Revolución histórica

Ahora es bastante probable que, en este recién estrenado año 2023, el arte experimente la mayor revolución de su historia. Ya no serán necesarias habilidades o talentos específicamente artísticos para crear grandes obras. Bastará tal vez el impulso, la valentía o la desnuda creatividad, acaso como el vago deseo de la neandertal de hace 40.000 años. Nos podremos dar la mano, quien sabe, con aquella extremidad inmortalizada en la piedra y en la oscuridad.

Si acaso tendrán ventaja aquellos pioneros que aprendan a sacar partido a las nuevas herramientas: DALL-E2, MidJourney, ChatGPT y otras que vendrán. Es el campo de juego del “machine learning”, la Inteligencia Artificial que aprende por sí misma.

Algunas de estas herramientas se pueden probar libremente con ciertas limitaciones. MidJourney acaba de rebajar sus tarifas, que están al alcance de casi cualquier bolsillo: 8 dólares al mes el programa básico, 48 el superior.

DeepDream está maridando las experiencias psicodélicas con este nuevo arte digital. Podemos decir que no hay un solo artista, sino una curiosa mezcla, como máquinas poshumanistas.

Co-creación

Así surgen árboles que no son solo plantas, sino seres de nueva creación. O animales que son bastante humanos. Make-A-Video ya te ofrece generar videos a partir de una descripción de texto.

Estas herramientas solo te piden una descripción escrita y el algoritmo busca por su cuenta entre millones de fuentes, con algunas de las palabras que empleamos en nuestra descripción. Luego cada uno manipula los resultados a su antojo.

En cierta forma, es una co-creación. Pero ya no necesitas una habilidad artística específica. Enrique Dans no advierte que estamos ante una rapidísima evolución, en la que son bastante imprevisibles las consecuencias.

Escritores y periodistas, atentos a la jugada o muchos se quedarán sin trabajo. ChatGPT es deslumbrante. Escribe en segundos todo tipo de encargos y empieza a ser un problema distinguirlos de los humanos. Algunas universidades empiezan a estudiar complicados cortafuegos.

Los periodistas deberán concentrarse en sus valores añadidos de originalidad y creatividad. No podemos competir en la clásica crónica de carril. O en la columna repetitiva de trillados asuntos de actualidad. También para nosotros empieza una nueva era.