Arqueología Marina

Insólito descubrimiento naval en Inglaterra

Los restos de un barco inglés del Siglo XVI hablan de los inicios de la marina mercante

Los restos del barco, en el interior de la cantera donde fueron descubiertos.

Los restos del barco, en el interior de la cantera donde fueron descubiertos. / Wessex Archaeology.

Eduardo Martínez de la Fe

Eduardo Martínez de la Fe

Restos de un barco de la época isabelina han sido descubiertos a 300 metros del mar en la costa inglesa de Kent. Construido de la misma forma que los barcos que exploraron y se asentaron en las costas atlánticas del Nuevo Mundo, habla de cómo fueron los inicios de la marina mercante.

Un extraño barco del siglo XVI ha sido descubierto inesperadamente por los trabajadores de una cantera a 300 metros del mar, en la costa inglesa de Kent.

Los restos del barco fueron desenterrados en abril pasado de una cantera inundada que estaba siendo dragada en busca de grava en el promontorio de Dungeness, a unos 100 kilómetros al sureste de Londres, pero el descubrimiento ha sido revelado ahora por Wessex Archaeology.

Los arqueólogos creen que la cantera formó parte de la costa en la era isabelina y que el barco pudo haber sido abandonado allí después de que naufragara entre rocas, o sencillamente porque ya no estaba en condiciones de navegar.

El barco no ha sido identificado, pero el análisis dendrocronológico de más de 100 maderas del casco, basado en los patrones de los anillos de crecimiento de los árboles, muestra que fue construido con árboles de roble inglés (Quercus robur) que habían sido talados entre 1558 y 1580.

Construcción particular

Eso significa, según se explica en un comunicado, que el barco pertenece a un período de transición en la construcción de barcos en el norte de Europa.

El barco ahora descubierto está construido con tablas depositadas sobre un armazón creado previamente, con el cual forman el casco exterior de la nave.

Esta forma de construcción difiere de los barcos anteriores, como los vikingos, construidos con clinker (también conocido como lapstrake), un método de construcción de barcos, originario de Escandinavia, en el que los bordes de los tablones del casco se superponen entre sí y forman como una especie de coraza.

Los barcos construidos con clinker fueron una marca registrada de la navegación nórdica a lo largo de la Edad Media, pero el barco descubierto ahora en Kent indica, por su forma de construcción, que pertenece a una época posterior.

Fotograma de un modelo 3D del barco del siglo XVI encontrado en la cantera de Dungeness.

Fotograma de un modelo 3D del barco del siglo XVI encontrado en la cantera de Dungeness. / Wessex Archaeology.

Barcos del Nuevo Mundo

Su técnica de construcción es similar a la que se utilizó en el Mary Rose, construido entre 1509 y 1511, que se hundió en 1545 durante una batalla con la Armada francesa. También se observa en los barcos que explorarían y se asentarían en las costas atlánticas del Nuevo Mundo, destacan los investigadores.

Los arqueólogos han registrado el barco mediante escaneo láser y fotografía digital. Una vez que su trabajo esté completo, las maderas se volverán a enterrar en el lago de la cantera donde fueron descubiertas, para que el limo pueda continuar preservando los restos.

La madera se pudre rápidamente, tanto en el aire como en el agua y, por lo general, dura solo unos pocos años, a menos que esté protegida por una capa anaeróbica de sedimento, es decir, una capa que la proteja del oxígeno.

Por este motivo, los restos de muy pocos barcos viejos de madera sobreviven para ser encontrados.

Oportunidad fascinante

Los arqueólogos creen que las maderas del barco Dungeness pueden haber estado cubiertas por una capa anaeróbica de limo debajo del suelo del lago de la cantera, por lo que seguirán protegiéndolo de mayores deterioros con el paso del tiempo cuando sean devueltas a su lugar de origen.

Su descubrimiento, en cualquier caso, ha asombrado a arqueólogos e historiadores porque representa una oportunidad fascinante para comprender el desarrollo de la costa, los puertos y el transporte marítimo de este tramo de la costa de Kent en una época remota poco conocida.

El barco ahora descubierto navegó durante una época en la que el comercio se estaba expandiendo y el Canal de la Mancha servía como una vía estratégica para los barcos comerciales, dicen los investigadores.

Durante el reinado de la reina Isabel I, que se prolongó desde el 17 de noviembre de 1558 hasta el 24 de marzo de 1603, Inglaterra vivió una época de expansión del comercio naval, estimulado por la formalización de intercambios con Rusia, Turquía y Venecia.

Información de otra época

De hecho, la mayoría de los naufragios conocidos de la época isabelina han sido designados como restos de barcos mercantes, especialmente el barco Gresham, que se hundió en el siglo XVI y permaneció intacto durante 500 años en el fondo del Támesis.

Este barco es el único ejemplo arqueológico conocido de la práctica del furring, un tipo de método de reconstrucción de barcos propio de finales del siglo XVI y principios del siglo XVII en Inglaterra.

Este barco también brindó información relevante sobre muchos aspectos de la construcción naval, desde el abastecimiento y el trabajo de la madera hasta las prácticas de los astilleros, ya que los constructores navales del siglo XVI siguen siendo desconocidos y rara vez registraron los métodos que utilizaron.

Aunque el barco de Kent permanece sin identificar, representa asimismo una época en la que los barcos y puertos ingleses jugaron un papel importante en este intenso tráfico de la época, algo significativamente importante para los investigadores.