El CERN ha roto relaciones con el Instituto Conjunto de Investigación Nuclear de Moscú, creado poco después del de Ginebra con la participación de 18 países, entre ellos China, Ucrania y otras naciones europeas amenazadas hoy por Rusia, para el desarrollo pacífico de la energía nuclear.

La Organización Europea para la Investigación Nuclear (CERN), que alberga el destructor de átomos más grande del mundo, ha adoptado nuevas medidas para limitar su cooperación con los institutos de investigación de Rusia después de la invasión de Ucrania.

El Consejo del CERN, el órgano rector de la organización con sede en Ginebra, anunció el viernes que sus científicos suspenderán la participación en todos los comités científicos en Rusia y en la vecina Bielorrusia, un aliado ruso que facilitó la invasión del 24 de febrero.

El pasado 8 de marzo, el CERN había suspendido el estatus de observador que tenía la Federación Rusa, que se otorga a los Estados que han hecho contribuciones significativas al laboratorio, y señalado que no participará en nuevas colaboraciones con sus instituciones científicas hasta nuevo aviso, como consecuencia de la invasión de Ucrania.

En un nuevo comunicado, el CERN anuncia que suspende la participación de científicos del CERN en todos los comités científicos de instituciones ubicadas en la Federación Rusa y la República de Bielorrusia, y viceversa; así como en todos los eventos organizados conjuntamente entre el CERN y las instituciones ubicadas en Rusia y Bielorrusia.

Asimismo, suspende la concesión de contratos de asociación como miembros asociados del personal del CERN a cualquier persona nueva afiliada a instituciones de origen en Rusia y Bielorrusia.

Golpe a la estrella nuclear rusa

El segundo paquete de medidas del CERN se dirige específicamente al Instituto Conjunto de Investigación Nuclear (JINR), un centro ruso de investigación de ciencias nucleares situado al norte de Moscú.

En cuanto al JINR, con el que el CERN tiene la condición de observador recíproco, el Consejo del CERN decidió suspender la participación de científicos del CERN en todos los comités científicos de JINR, y viceversa; así como suspender o, en su defecto, cancelar, todos los eventos concertados conjuntamente entre CERN y JINR.

Además, ha decidido no participar en nuevas colaboraciones con JINR hasta nuevo aviso; suspender el estatus de Observador de JINR en el Consejo del CERN y retirarse asimismo de su estatus de Observador en el JINR.

Por último, el Consejo del CERN advierte que en el mes de junio tomará más medidas relativas a la suspensión de acuerdos de cooperación internacional con el JINR, después de analizar más información y establecer un plan de acción.

Cooperación nuclear

El JINR está integrado por 18 Estados miembros, además de Rusia, entre los que figuran Ucrania, la República Checa, Polonia, Moldavia, Bulgaria, Rumanía y Checoslovaquia, el primero invadido por Rusia y los demás directamente amenazados por el Kremlin.

Además, son miembros del JINR, Armenia, Azerbaiyán, Bielorrusia (aliado de Rusia en la invasión de Ucrania), China, Cuba, Georgia, Kazajistán, Mongolia, Corea del Norte, Rusia, Uzbekistán y Vietnam. Entre todos aportan 1.200 investigadores, entre los que figuran asimismo destacados científicos de Francia, Alemania, Italia y Estados Unidos.

El instituto cuenta con siete laboratorios, cada uno con su propia especialización: física teórica, física de altas energías (física de partículas), física de iones pesados, física de materia condensada, reacciones nucleares, física de neutrones y tecnología de la información. El instituto tiene una división para estudiar la radiación y la investigación radiobiológica y otros experimentos físicos experimentales.

Los principales instrumentos de investigación del JINR incluyen un acelerador de partículas, así como un reactor de pulso rápido de neutrones con diecinueve instrumentos asociados que reciben haces de neutrones.

Paralelo al CERN

El JINR se fundó en 1956, poco después de la constitución del CERN, como un intento de la antigua Unión Soviética de disponer de un centro de investigación paralelo al de Ginebra.

El JINR ha cooperado con muchas organizaciones a lo largo de su historia. Una de las principales ha sido la UNESCO, con la que ha colaborado desde 1997. Con el CERN viene colaborando desde 2014.

También ha colaborado con Ministerio Federal de Educación e Investigación (BMBF) en Alemania desde 1991; con el Instituto Nacional de Física Nuclear de Italia desde 1996; con la Universidad de Turín desde 1999; y con la European Physical Society (EPS) desde 1990.

Todas estas relaciones están afectadas por las secuelas de la invasión de Ucrania por parte de Rusia. La UNESCO advierte de los riesgos de la guerra para el patrimonio cultural de Ucrania, mientras que las instituciones italianas han roto relaciones científicas con Rusia, y la EPS se ha sumado asimismo a la suspensión de colaboraciones con la ciencia rusa.

Eso significa que el marco de relaciones científicas establecido por el JINR a lo largo de los años ha saltado por los aires como consecuencia de la invasión rusa de Ucrania, en un campo de investigación que se había orientado desde los años cincuenta para el uso pacífico de la energía atómica.

Los únicos socios significativos para la cooperación científica en el campo nuclear que le quedan a Rusia son China y Corea del Norte.

Con China, Rusia tiene el proyecto de construir de cuatro nuevos reactores nucleares en el país asiático, así como de desarrollar la cooperación para alcanzar la fusión nuclear.

Corea del Norte, que ha apoyado la invasión rusa de Ucrania, acaba de lanzar un misil balístico intercontinental (ICBM) prohibido por las moratorias internacionales. Es un aliado con el que coquetean tanto Rusia como China.