El meteorito marciano descubierto en la Antártida en 1984 y denominado ALH 84001 contiene moléculas orgánicas, pero no demuestran que haya habido vida en Marte hace más de 3.000 millones de años. La controversia científica continúa.

 Una nueva investigación alimenta una controversia científica originada en 1984, cuando un meteorito de origen marciano, denominado ALH 84001, fue descubierto en un rincón perdido de la Antártida.

ALH 84001 se formó en Marte hace 4.500 millones de años y después de vagar por el espacio exterior llegó a la Tierra hace unos 13.000 años. El análisis de ese meteorito llevó a la NASA a anunciar en 1996 que una posible forma primitiva de vida podía haber existido en Marte hace más de 3.000 millones de años.

Dos años después, otra investigación de la Universidad de California señaló que las conclusiones anteriores obtenidas del análisis del meteorito estaban contaminadas por el hielo que rodeaba a la roca marciana.

En 2020, otro estudio, realizado por científicos de la Agencia de Exploración Aeroespacial de Japón (JAXA) y del Instituto Tecnológico de Tokio (ELSI), identificó compuestos orgánicos que contenían nitrógeno dentro del meteorito, apoyando así la idea de que en Marte pudo haber vida en un remoto pasado.

Reacciones químicas

La nueva investigación, liderada por la Institución Carnegie para la Ciencia y publicada en la revista Science, ha concluido ahora que las moléculas orgánicas encontradas en el meteorito de Marte no son signos de vida, sino que se formaron en reacciones químicas entre el agua y la roca en el Planeta Rojo hace unos 4.000 millones de años.

Las moléculas orgánicas generalmente incluyen cualquier compuesto con carbono, y también pueden poseer oxígeno, nitrógeno, azufre y otros elementos.  Estos compuestos orgánicos a menudo se asocian con la vida, pero también pueden surgir debido a la actividad abiótica o no biológica, destacan los investigadores.

Añaden que las reacciones químicas que ocurrieron entre el agua y la roca en el Planeta Rojo produjeron material orgánico a partir de la reducción del dióxido de carbono: de hecho, la síntesis abiótica de moléculas orgánicas ha sido parte de la geoquímica marciana durante gran parte de la historia del planeta rojo.

Aclaran también que los rovers de Marte han encontrado moléculas orgánicas complejas en las rocas antiguas expuestas en la superficie del planeta, así como metano en la atmósfera moderna.

Sin embargo, nunca ha quedado claro qué procesos produjeron estos compuestos orgánicos, con propuestas que incluyen fuentes tanto bióticas como abióticas. El mismo debate se ha repetido con el meteorito marciano hallado en la Antártida.

Igual que en la Tierra

La nueva investigación descubrió que los compuestos orgánicos del meteorito marciano de la Antártida estaban asociados con minerales similares a las serpentinas, que frecuentan los ambientes húmedos.

Estos hallazgos sugieren que los químicos orgánicos detectados en ALH 84001 pueden haberse formado debido a interacciones agua-roca, similares a las que se sabe que ocurren en la Tierra.

Un proceso, llamado serpentinización, ocurre cuando las rocas volcánicas ricas en hierro o magnesio interactúan químicamente con el agua en circulación, cambiando su naturaleza mineral y produciendo hidrógeno.

La otra interacción, llamada carbonatación, involucra rocas que reaccionan con agua ligeramente ácida que contiene dióxido de carbono disuelto para formar minerales de carbonato.

Los investigadores han concluido que los compuestos orgánicos en ALH 84001 se formaron cuando la roca volcánica interactuó con fluidos salobres a principios de la historia de Marte.

Señal de fondo

“Este tipo de reacciones geológicas no biológicas son responsables de un grupo de compuestos orgánicos de carbono a partir de los cuales la vida podría haber evolucionado y representan una señal de fondo que debe tenerse en cuenta al buscar evidencia de vida pasada en Marte”, explica el director de esta investigación, Andrew Steele, en un comunicado.

“Además, si estas reacciones ocurrieron en el antiguo Marte, deben haber ocurrido también en la antigua Tierra, y posiblemente también podrían explicar los resultados que hemos visto en la luna Encelado de Saturno. Todo lo que se requiere para este tipo de síntesis orgánica es que una salmuera que contenga dióxido de carbono disuelto se filtre a través de las rocas ígneas", añade Steel.

Y concluye: "la búsqueda de vida en Marte no es solo un intento de responder a la pregunta ¿estamos solos? También se relaciona con los entornos de la Tierra primitiva y aborda la cuestión de ¿de dónde venimos?”

La enorme controversia sobre si ALH 84001 incluía o no fósiles de microbios de Marte puede continuar, aunque la nueva investigación sugiere que los factores abióticos podrían ayudar a explicar estos aparentes fósiles.

Referencia

Organic synthesis associated with serpentinization and carbonation on early Mars. A. Steele et al. SCIENCE, 13 Jan 2022. Vol 375, Issue 6577, pp. 172-177. DOI:10.1126/science.abg7905