Distancia, preocupación y frialdad fueron los signos que mostraron David Bustamante y Paula Echevarría durante su estancia en Londres, capital británica a la que viajaron el pasado seis de octubre sin su hija Daniella y acompañados por unos buenos amigos. El matrimonio está atravesando uno de los momentos más delicados y, según apuntan los rumores, están luchando por mantener viva la llama de su amor.

Desde que en marzo de 2005 comenzaron su relación sentimental, el cantante y la actriz no han dejado de demostrar públicamente sus detalles de amor, de ternura y de romanticismo. Sin embargo, y a pesar de que a ambos le sonríe el terreno profesional, la pareja no está viviendo su mejor momento, según aseguran fuentes próximas a la artista.

Tal y como indica la revista Diez Minutos, parece ser que los compromisos laborales de los dos está influyendo en su relación sentimental, ya que pasan demasiado tiempo separados.

Por un lado, David está concentrado en el lanzamiento de su octavo disco, Mío, que saldrá el próximo 25 de octubre. Recientemente ha viajado a Lisboa para grabar el videoclip de su sencillo Como tú, ninguna, así como también ha actuado en Valencia y en Cannes y ha estado de promoción en Madrid.

Mientras el cantante se fue de gira por España el pasado verano, Paula, por su parte, estuvo casi dos meses en Argamasilla de Alba (Ciudad Real), para grabar la película Vulnerables. Y ahora la actriz se halla centrada en el rodaje de la tercera temporada de la serie de TVE Gran Reserva, realizado en La Rioja.

También sorprende que el matrimonio ha cambiado, radicalmente, su visión de tener hijos. Antes se mostraban ilusionados con darle un hermanito a Daniella, pero el mes pasado Paula aseguró que no querían tener más niños. A ello se añadió la puesta en venta de su casa de Villanueva del Pardillo (Madrid) pensando en un reparto de dinero en caso de que no se solucionaran los problemas que atraviesan como pareja, según apuntan fuentes próximas a Paula, recogidas por la citada revista.

No obstante, David y Paula no quieren tirar la toalla y se han concedido una escapada a Londres a fin de recuperar la ilusión y la pasión que les unió el primer día, algo que no solamente lo hacen por ellos mismos, sino también por su hija Daniella.